En cada punto cardinal de Alemania encontraremos una ciudad importante que atrae a un gran número de turistas. Al norte del país se encuentra Hamburgo; en el oeste, Colonia; al este, su capital, Berlín; en el centro, Frankfurt y al sur, en el precioso estado de Baviera, con los imponentes Alpes casi al alcance de la mano, la ciudad de Múnich. En Múnich descubriremos cómo es el estilo de vida de los bávaros visitando lugares como sus mercadillos o las típicas tabernas bávaras donde degustar platos típicos de la región o una buena jarra de cerveza, pero también destaparemos el tarro de las esencias y recorreremos sus calles para visitar los monumentos más importantes de la capital bávara.

Qué ver en Múnich en un fin de semana o en tres días

 
Pero, en una ciudad tan grande como Múnich, con cerca de un millón y medio de habitantes, ¿qué podemos ver en un fin de semana o en tres días?: el primer día lo podemos dedicar a conocer los monumentos más importantes del casco antiguo y parar a degustar los platos típicos de la región y la típica cerveza bávara en la famosa Hofbräuhaus; el segundo día, a visitar alguno de sus museos y recorrer el mercadillo más famoso de la ciudad; el tercer día, lo podemos reservar para visitar los lujosos y enormes palacios de la ciudad. Sigue leyendo porque esto es lo que hay que ver en Múnich.

Puertas de la muralla

 
Múnich es otra de las ciudades que, por su importancia en la Edad Media, se encontraba protegida por una muralla. Hoy en día, se conservan tres puertas de esa primitiva muralla: Isartor, Karlstor y Sendlingertor. La más importante de las tres es la Isartor, construida en la primera mitad del siglo XIV y reformada en siglos posteriores. Karlstor se encuentra al final de la calle Neuhausstrasse, una de las arterias comerciales de la ciudad alemana, en la preciosa plaza llamada Karlsplatz. Por último está la Sendlingertor, puerta que también data de la primera mitad del XIV.

Marienplatz

 
Así como una de las visitas imprescindible que hay que hacer en Madrid es la Plaza Mayor o en Sevilla la Plaza de España, en Múnich hay una plaza que es visita obligada cuyo nombre es Marienplatz. Situada en el centro neurálgico de la ciudad, en la plaza hay cuatro construcciones imprescindibles: el Neues Rathaus (ayuntamiento nuevo) es una construcción de finales del XIX y principios del XX de estilo neogótico que llama la atención por la fachada, la torre y un carillón cuyas figuras se ponen en marcha cada día a las 11, 12 y 17. Y si en la plaza hay un ayuntamiento nuevo, también hay uno viejo, el Altes Rathaus. En la parte central de la Marienplatz está la Mariensäule (Columna de Santa María), construcción de 1638. Por último, hay que destacar la fuente Fischbrunnen, de la segunda mitad del siglo XIX. En esta plaza es donde se coloca cada mes de diciembre uno de los mejores mercadillos de navidad del sur de Alemania.

Catedral de Múnich

 
Otro de los monumentos imprescindibles de Múnich es la Catedral de Nuestra Señora, templo de enormes dimensiones flanqueado por dos esbeltas torres. En el interior está la tumba de Luis IV de Baviera, conocido como Ludwig el bávaro, quien fuera Emperador del Sacro Imperio en 1328.

Iglesia de San Pedro

 
Seguimos buscando templos religiosos de la ciudad. La Iglesia de San Pedro, conocida por los muniqueses como “Alter Peter” (Pedro viejo) es la más antigua de la capital bávara. De estilo renacentista, las vistas que nos deja su torre de más de 50 metros y algunos tesoros que guarda en su interior son dos motivos más que suficientes para acercarnos a visitarla.

Iglesia de Asam

 
Completa el trío de templos religiosos más importantes de la ciudad la Iglesia de Asam (Asamkirche), levantada en el siglo XVIII, destaca por la combinación del estilo barroco con el rococo, lo que se traduce en un interior profusamente decorado.

Viktualienmarkt

 
Como decíamos en la entrada del artículo, si visitamos Múnich en un fin de semana o tres días, deberíamos dedicar parte de una mañana a descubrir los productos más famosos de la región en sus mercadillos. En Múnich ese mercadillo tiene nombre: Viktaulienmarkt. Se trata de un mercado al aire libre del casco antiguo de grandes dimensiones, con numerosos puestos donde encontraremos un amplio catálogo de deliciosos productos y donde podemos hacer una parada para probarlos en alguno de los restaurantes que hay junto al mercado.

Cervecería Hofbräuhaus

 
Una de las imágenes más marcadas que tenemos de Baviera es la de grandes tabernas en las que probar los platos tradicionales de la región y tomar una cerveza, llenas de gente vestidas con los trajes típicos de la región. Esto lo encontraremos en Múnich en la Hofbräuhaus. Fundada a finales del XVI como fábrica de cervezas, dejaría su función inicial para convertirse en cervecería. Tiene gran importancia histórica, ya que fue lugar de reunión de Hitler y el partido nazi antes de su llegada al poder. Fue destruida durante la 2ª Guerra Mundial y reconstruida unos pocos años después.

Odeonplatz

 
La Odeonplatz también tuvo sus conexiones con el nazismo. Se trata de una imponente plaza con sabor italiano, ya que algunos de sus monumentos evocan el estilo del país transalpino como el Feldherrnhalle, levantado en 1841 como homenaje al ejército bávaro. La Theatinerkirche (Iglesia de los Teatinos) es una construcción de la segunda mitad del XVII que combina los estilos barroco y rococó y que llama la atención por el color amarillo de la fachada. Además, en la plaza está el bonito jardín de inspiración italiana conocido como Hofgarten.

Parques y jardines de Múnich

 
Para relajarse, descansar, pasear y desconectar por un rato del bullicio del centro de la ciudad, nada mejor que acercarse a alguno de los parques más bonitos de Múnich. Hay dos en la ciudad de visita obligada:

Englischer Garten: el parque de los parques de Baviera. Enorme espacio que copia el modelos de los jardines ingleses. Repleto de árboles, plantas, lagos, esculturas y curiosas construcciones como una casa de té japonés o una pequeña torre china. Como nota curiosa, en este parque los amantes del surf podrán dar rienda suelta a su pasión ya que es posible realizar esta práctica en el Eisbach, un pequeño río con olas que hay en el parque.

Olympiapark: tendríamos que tomar el metro para llegar al segundo parque que recomendamos visitar en Múnich, el Olympiapark. Se trata del lugar en el que en 1972 se levantaron las instalaciones para las olimpiadas. Una vez allí, es fácil imaginarse a los atletas que participaron en aquellos juegos estableciendo nuevos récords o ganando medallas. Más allá de lo que supusieron los Juegos Olímpicos para la ciudad en 1972, el Olympiapark es un lugar ideal para pasear o relajarse. En el parque llaman la atención del visitante la Olympiaturm, torre de televisión que roza los 300 metros y la conocida como “Montaña de los escombros”

Palacios que ver en Munich

 
Y como decíamos al comienzo, si visitas Múnich deberías reservar casi un día entero para ver sus palacios, ya que por el tamaño y la majestuosidad de éstos, te llevará un buen rato la visita a cada uno de ellos. Hay dos importantes:

Residenz: Junto a la Odeonplatz se encuentra la Residenz, palacio real de estilo barroco que fue residencia de los monarcas bávaros durante varios siglos. De dimensiones descomunales, en sus numerosas salas encontraremos numerosos elementos que muestran el lujo con el que vivían los monarcas. Destacan el salón de los espejos y el teatro Cuvilliés.

 
Palacio de Nymphenburg: A las afueras de la ciudad encontramos el otro de los grandes palacios muniqueses, el Palacio de Nymphenburg. Edificio barroco del siglo XVII que era utilizado también como residencia real, pero en este caso de verano. En el interior, salones ampliamente decorados. En el exterior, extenso jardín salpicado por varias construcciones.

Museos de Múnich

 
Por último, los amantes del arte y los museos tienen en Múnich un amplio catálogo, solo es cuestión de elegir aquel que más se adapte al gusto de cada uno. Algunos de los museos para visitar en Múnich son:

• Alte Pinakothek
• Neue Pinakothek
• Deutsches Museum
• Museo BMW Welt
• Städtische Galerie im Lenbachhaus und Kunstbau Münche