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Almería: entre el castillo y el mar


Famosa por su notable producción agroalimentaria, por ser uno de los platós al aire libre más destacados de Europa (en el que se han rodado desde películas del Far West hasta escenas de Juego de Tronos) y por su buen tiempo, Almería es una de las ciudades españolas que, a menudo, quedan fuera de los circuitos turísticos más concurridos. Sin embargo, sus encantos bien merecen una ruta. ¿Hacemos las maletas?

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Datos Útiles


País: España
Idioma: Español
Zona Horaria: GMT +1
Moneda: EUR
Requisitos de entrada: DNI válido

Entre la Alcazaba y el puerto, la ciudad de Almería se erige como una urbe tranquila, con un interesante patrimonio y un sinfín de tesoros escondidos esperando a ser descubiertos por el visitante. Sus casas señoriales, sus murallas y sus calles y plazas, como la Puerta Purchena, son solo algunos de los atractivos de la ciudad andaluza. Éstas son algunas de nuestras recomendaciones que no puedes perderte si decides visitar Almería:

-. La Alcazaba: se trata de una antigua fortaleza árabe, sede del gobierno de la taifa almeriense (reino independiente musulmán que nació de Al-Andalus), cuya construcción comenzó en 955 por orden de Abderramán III. Sin embargo, se calcula que el palacio no estuvo terminado hasta el siglo XI bajo el mandato de otro monarca, Hayrán. Está formada por tres recintos: el palacio (residencia de los gobernantes y sus séquitos), el campamento militar y un castillo cristiano, levantado por orden de los Reyes Católicos tras su conquista en 1489. De la zona más lujosa, el palacio, donde había mezquita, baños árabe sy comercios, sólo quedan restos arqueológicos, ya que se cree que varios terremotos producidos durante la Edad Media lo destruyeron casi totalmente.

-. Murallas del Cerro de San Cristóbal: junto a la Alcazaba se levanta la muralla de Jairán que desciende a través del barranco de la Hoya y luego vuelve a ascender hasta el Cerro de San Cristóbal. Se trata de un excepcional ejemplo de fortificación amurallada.

-. Antiguo Hospital de Santa María Magdalena: este edificio, de mediados del siglo XVI, es una de las construcciones de la Edad Moderna más destacadas de Almería. Destaca su patio, su pórtico (entre barroco y neoclásico) y su capilla.

-. Círculo Mercantil: el edificio del Círculo Mercantil e Industrial y Teatro Cervantes, de 1921 y obra del arquitecto Enrique López Rull, es una construcción monumental que dio respuesta en su momento a la aspiración de la ciudad de disponer de un edificio para usos culturales y recreativos. De sus cuatro fachadas, la más llamativa es la que da al Paseo de Almería, una construcción ecléctica y ricamente adornada.

-. Puerta Purchena: considerada el centro geográfico de la ciudad, la Puerta Purchena es una plaza situada donde antiguamente se ubicaba la Puerta de Pechina, desaparecida en 1855 tras el derribo de la muralla. Desde ese mismo año, donde había estado la antigua puerta, se erigió una plaza que, con el paso del teimpo, se ha convertido en lugar habitual de reunión para los almerienses. En la plaza pueden verse también algunas casas palaciegas, como la Casa de la Mariposas (ejemplo de arquitectura burguesa del siglo XIX), en su mayoría construidas por empresarios enriquecidos durante el boom de la minería entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera del siglo XX.

-. Mercado Central: muy cerca de la Puerta Purchena, en una de las calles más famosas de la ciudad, la Rambla Obispo Orberá, se levanta el que fuera mercado de abastos de Almería, que data de 1892. Es un edificio que ejemplifica la arquitectura del hierro de finales del siglo XIX, por lo que merece una visita.

-. Cable Inglés: el cable inglés es un gran muelle metálico, una notable obra de ingeniería creada para servir como cargadero de mineral construido por la compañía The Alquife Mines and Railway Company Limited. Su misión era dar salida por mar a todo el material que llegaba por tren desde las Minas de Alquife y que se acumulaba en el Puerto de Almería. Se trata de un gran ejemplo de la arquitectura del hierro. Su construcción concluyó en el año 1904 y unía la estación con el puerto. De estilo ecléctico caracterizado por el uso de los nuevos materiales, siguió las directrices de la escuela de Gustave Eiffel.

-. Paseo Marítimo: una caminata por el Paseo Marítimo es otra de las experiencias que no podemos perdernos en la ciudad. Su agradable clima durante todo el año lo convierte en un paseo precioso, adecuado para contemplar el mar y disfrutar de bonitas vistas. Eso sí, las temperaturas veraniegas, a menudo hacen más aconsejable dejar esta visita para las horas en las que cae el sol.


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