Entre paisajes recorridos por Don Quijote, llanuras con olor a zarajos y morteruelos, extensiones de lavanda y romero y enormes piedras atravesadas como un puñal por cauces de ríos, se encuentran algunos de los pueblos más bonitos de la provincia de Cuenca.
Más allá de Cuenca y sus casas colgadas, la provincia ofrece al visitante un amplio surtido de paisajes y pueblos donde historia, tradición y futuro se funden para crear una amalgama de imágenes y sensaciones únicas.
Si bien es cierto que los paisajes de la Alcarria o de la Serranía de Cuenca son espectaculares, lo que hoy queremos es recorrer los pueblos de Cuenca con mayor encanto y que merecen una visita.
ALARCÓN:
Alarcón, por su bello entorno natural y por un conjunto monumental de primera categoría, es una de las localidades que merecen estar en cualquier lista que recoja los pueblos más bonitos de Cuenca.
Alarcón se encuentra situada al sur de la provincia conquense, a unos 83 kilómetros de su capital. Pertenece a la comarca de la Manchuela.
Sobre una enorme mole de piedra se asienta este pueblo que es abrazado por el Júcar y vigilado de cerca por el pantano de Alarcón, lugar escogido por los habitantes del pueblo para darse un chapuzón y practicar deportes acuáticos en los días más calurosos del verano manchego.
En lo alto del cerro sobresale el castillo, construcción del siglo XVI con recinto amurallado que ha sabido conservarse en perfecto estado a lo largo de los siglos. Hoy en día es Parador Nacional.
No muy lejos del castillo se encuentran otros edificios de gran valor y que son una magnífica muestra de diferentes estilos, la Iglesia de la Santa Trinidad, de estilo gótico y la de Santo Domingo de Silos, de estilo románico, son dos claros ejemplos. En la Iglesia de Santa María se dejan ver elementos góticos y renacentistas. Muy interesante nos parece el Centro de Arte de Pintura Mural de Jesús Mateo, ubicado en la antigua Iglesia de San Juan Bautista y declarado de Interés turístico mundial.
BELMONTE:
Otro de los pueblos con más encanto de Cuenca es Belmonte.
Belmonte se encuentra a 95 kilómetros de la capital, en la comarca de La Mancha, al sudoeste de la provincia.
Se trata de una seductora villa medieval de casas blancas coronada por un imponente castillo del siglo XV y de estilo gótico-mudéjar, en un estado de conservación envidiable; de hecho ha sido declarado Monumento histórico-artístico y Bien de Interés Cultural. Como curiosidad cabe destacar que en el castillo de Belmonte se rodaron las películas de El Cid, en el año1961, y Juana la Loca, en 2001.
En Belmonte podemos visitar la Colegiata de San Bartolomé, del siglo XV y el Palacio del Infante Don Juan Manuel, antiguo alcázar.
Por último, no podemos terminar la visita a Belmonte sin añadir que en el pueblo nació en 1527 el gran poeta Fray Luis de León.
BETETA:
Nos movemos hasta el extremo norte de la provincia conquense para visitar Beteta, localidad situada a 80 kilómetros de Cuenca en la comarca de la Serranía Alta.
La indiscutible belleza de Beteta reside en la perfecta combinación de entorno natural, cuya representación máxima es una hoz creada por el río que discurre a los pies de enormes barrancos, y la riqueza monumental que queda reflejada en algunos de los monumentos más relevantes del pueblo, como el castillo de Rochafrida, del siglo XIII, la Iglesia gótica de la Asunción o la preciosa Plaza Mayor porticada.
ENGUÍDANOS:
No podemos dejar fuera de nuestro recorrido por los pueblos más bonitos de Cuenca a Enguídanos, cuyo paisaje, compuesto por embalses, piscinas naturales y cascadas de aguas limpias y cristalinas, se encuentra entre los más espectaculares de la provincia. El entorno de Enguídanos es perfecto para disfrutar de actividades al aire libre cuando llega el buen tiempo.
Pero antes de disfrutar del entorno de la localidad,conviene perderse por sus calles y disfrutar de cada uno de los rincones del pueblo, salpicado de casas nobles, o sentarse en la plaza mayor y dejar pasar el tiempo lentamente.
En lo alto de un montículo se encuentra el castillo de Enguídanos, del siglo XI y con origen musulmán.
HUETE:
Cuesta entender como un pequeño pueblo de menos de 2000 habitantes puede contener tal cantidad de monumentos. Quizás se deba a que Huete sea una de las localidades más antiguas de la provincia y a que diferentes civilizaciones hayan dejado su impronta en esta localidad de la Alcarria, situada en el norte de la provincia y a tan solo 50 kilómetros de la capital.
Así, encontramos la huella musulmana en el Castillo de Luna, también conocido como Alcazaba de Wabda y en las murallas. Si bajamos al pueblo la lista de construcciones significativas es enorme. El Monasterio de Santa María de la Merced encabeza, sin duda, el conjunto monumental de Huete. A su vera se sitúan edificios religiosos, como el Palacio episcopal, el Convento de Jesuitas, el Convento de Jesús y María, las ermitas de San Sebastián y de San Gil y las Iglesias de Nuestra Señora de Atienza y de Santo Domingo.
La torre del reloj y varios palacios y casas nobiliarias completan la nómina de monumentos de esta localidad conquense.
Para finalizar, comentar que Huete posee varios museos, destacando por encima de los demás el Museo Florencio de la Fuente de Arte Contemporáneo.
MOTA DEL CUERVO:
A algo más de 110 kilómetros de la capital, al sur de la provincia, se encuentra otro de los pueblos más atractivos de la provincia de Cuenca, Mota del Cuervo.
Si Don Quijote apareciera de pronto por los alrededores de esta localidad de La Mancha, no dudaría en enfrentarse a 7 molinos de viento que le plantarían cara sin necesidad de convertirse en gigantes. Así es, en lo alto de un pequeño montículo se encuentran estos 7 molinos que son el mayor atractivo turístico de un pueblo que es lugar de paso de la ruta de Don Quijote.
Por las magníficas vistas que desde la localidad se tiene de un cautivador paisaje de lagunas y humedales, el pueblo de Mota del Cuervo esconocido como el Balcón de la Mancha.
En sus calles, iglesias, conventos, ermitas y casas señoriales reciben al visitante.
MOYA:
Aunque se trate de un pueblo ya abandonado, no nos resistimos a incluir a Moya en la lista de los pueblos más bonitos de Cuenca. A pesar de que las gentes de Moya abandonaran por completo la localidad en el siglo XX, su importante pasado medieval dejó en el lugar bellas muestras de arquitectura. Por las calles despobladas de Moya existen todavía restos de su castillo y varios monumentos como el Convento de la Concepción Franciscana y la Iglesia de la Trinidad.
PRIEGO:
Muy cerca de la Serranía de Cuenca, en la comarca de La Alcarria, y a 60 kilómetros de la capital se encuentra el pueblo de Priego, uno de esos pueblos medievales que conservan aún hoy un vasto legado arquitectónico.
De una antigua fortaleza árabe se puede ver todavía el Torreón de Despeñaperros. El gótico se puede apreciar en la Iglesia de San Nicolás de Bari, del siglo XVI y en el recinto religioso del Convento del Rosal. Ejemplo de construcción arquitectónica renacentista la tenemos en el edificio del Ayuntamiento, en la Plaza Mayor. Por las calles de Priego encontraremos también varias casas nobles y alguna que perteneció a la inquisición.
SAN CLEMENTE:
En el sur de la provincia, en la comarca de la Mancha alta y a 110 kilómetros de Cuenca se encuentra la población de San Clemente.
Esta localidad conquense atesora un conjunto monumental renacentista difícil de encontrar en otros lugares de la región. Tal acumulación de construcciones de corte renacentista convierten al casco histórico de San Clemente en uno de los más interesantes que se pueden ver en la provincia, hasta el punto de haber sido declarado Conjunto Histórico-Artístico.
El mayor tesoro arquitectónico del pueblo es el edificio del Ayuntamiento, magnífica muestra del estilo renacentista. En la plaza mayor, además del ayuntamiento, se encuentra la Iglesia de Santiago Apóstol. La Torre Vieja acoge el Museo Etnográfico de Labranza. La visita a los lugares de interés de San Clemente se completaría con el Arco Romano, el Castillo de Santiago de la Torre, la Ermita Virgen de Rus y varios palacios y casas nobles.
UCLÉS:
Terminamos el recorrido por los pueblos de Cuenca que merecen una visita en Uclés.
Al norte de la provincia, en la comarca de la Mancha Alta ya 70 kilómetros de Cuenca se encuentra Uclés, lugar que fue refugio de varios pueblos que dejaron su impronta en la localidad en forma de monumentos.
Como ejemplo de las huellas que algunas civilizaciones dejaron en Uclés está el castillo árabe del siglo IX, a día de hoy sólo quedan algunos restos de lo que en su día tuvo que ser una imponente construcción. Sin embargo, si de algo puede presumir Uclés es del magnífico monasterio del siglo XVI conocido, tanto por su estilo como por sus dimensiones, como el “Escorial de la Mancha”. Esta construcción perteneció a la Orden de Santiago y como curiosidad destacar que, como muchos otros dentro de la geografía española, el edificio tuvo la función de prisión durante la guerra civil.
La Fuente Redonda, la necrópolis romana y varias casas solariegas son algunas construcciones destacadas de la localidad.
Si quieres conocer otros pueblos y ciudades con encanto tanto de España como de otros lugares del mundo, no dudes en entrar en nuestro Magazine donde encontrarás multitud de sorteos, promociones, ofertas y descuentos.