Los pueblos más bonitos de Cantabria interior son lugares envueltos por una atmósfera de paz y tranquilidad, alejados del tráfico y de la contaminación y apartados del turismo de masas, protegidos por altas cumbres y cubiertos, en muchas ocasiones, por un manto verde donde pastan las vacas. Sus calles empedradas esconden recias casonas de piedra que reproducen fielmente la tradicional arquitectura de montaña de la región. Y en sus restaurantes, el viajero puede hacer un alto para dar buena cuenta de uno de los platos típicos de la zona, el cocido montañés.

Más allá de la hermosísima villa de Potes, de la cual ya hablamos en otra reseña, recorremos la comunidad de Cantabria de oeste a este, para encontrar en el camino los pueblos más bonitos del interior de Cantabria.

Pueblos más bonitos de Cantabria interior

Mogrovejo

Comenzamos el recorrido por el interior de Cantabria descubriendo el pequeño pueblo de Mogrovejo, asentado en la comarca de Liébana y rodeado de un hermoso paisaje de altas cumbres, las del macizo de Ándara.

Recientemente añadido a la lista de pueblos más bonitos de España y declarado Bien de Interés Cultural y Conjunto histórico, Mogrovejo cuenta con un importante conjunto monumental. Así, tenemos como construcción más importante de la localidad la Torre de Mogrovejo, del siglo XIII. También merece la pena acercarse hasta la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción para descubrir, entre otras cosas, su precioso altar. En las calles de Mogrovejo disfrutaremos de un buen puñado de casas típicas de la comarca, entre las que destaca la de Vicente de Celis, así como de otras construcciones tradicionales.

Bárcena Mayor

Generalmente, cuando hablamos en nuestras rutas de los pueblos más bonitos de un lugar, casi siempre hay uno que, al referirnos a él, decimos que el viajero no debe buscar en el pueblo los monumentos más importantes, sino que lo único que tiene que hacer es perderse por sus callejuelas y disfrutar de cada rincón. Pues bien, cuando hablamos de los pueblos más bonitos del interior de Cantabria, Bárcena Mayor es el que cumple esa función.

Se trata del único núcleo habitado del Parque Natural Saja-Besaya. Un parque que es el alma del pueblo. Bárcena Mayor puede ser un buen lugar para atreverse con un exquisito cocido montañés, plato característico de los pueblos de interior de Cantabria, e ideal para vencer el frío de los días más duros de las montañas cántabras. Eso sí, recomendamos a aquel que acepte nuestra propuesta que dé buena cuenta del cocido montañés después de haber recorrido las preciosas calles empedradas de la localidad y se haya recreado con los magníficos ejemplos de la arquitectura tradicional de Cantabria.

Carmona

En el municipio de Cabuérniga encontramos un pequeño pueblo, perfecto para los que buscan tranquilidad en sus viajes. Y es que, la paz y la calma que transmite el paisaje de Carmona solo es roto por el sonido de las aguas del río Nansa y por los mugidos de alguna vaca que se acerca a pastar en los alrededores del pueblo. 

Carmona es otro de esos pueblos del interior de la región que está declarado Conjunto Hisórico-Artístico y que muestra como ningún otro el carácter de los pueblos de montaña cántabros. Esto lo podemos comprobar no solo en las construcciones de arquitectura tradicional de la zona, sino también en el estilo de vida de sus gentes. El monumento más destacado de Carmona es el Palacio de los Díaz de Cossío y Mier.

Cabezón de la Sal

Seguimos la ruta por los pueblos más bonitos de Cantabria interior, y nos acercamos hasta un lugar donde la sal ha sido a lo largo de los siglos un elemento importante, estamos hablando de Cabezón de la Sal. Entre los monumentos más destacados hay que hablar del Palacio de Ygareda, del siglo XVIII, situado en Carrejo y que es sede del Museo Regional de la Naturaleza.

En otra localidad del municipio de Cabezón de la Sal, Cabrojo, encontramos un magnífico yacimiento prehistórico datado en la Edad de Bronce.

Por último, no nos podemos ir de Cabezón de la Sal sin hablar antes de uno de los bosques más bonitos del norte de España, el Monumento Natural de las Secuoyas del Monte Cabezón. Allí descubriremos un espectacular bosque con más de 800 secuoyas, alcanzando alguna de ellas los 35 metros de altura.

Cartes

Cerca de una de las localidades más importantes de Cantabria, Torrelavega, se encuentra nuestro siguiente destino, Cartes.

¿Qué tiene Cartes para haber sido declarado Conjunto Histórico-Artístico ya en el año 1985? La respuesta es que, además de su entorno, con el río Besaya como protagonista, un núcleo urbano compuesto por hermosas calles y recias casonas que son decoradas con primor por los vecinos de la localidad. Además, posee varios edificios importantes como la Iglesia de Santa María de Yermo o el Torreón de Cartes.

Liérganes

Finalizamos la ruta por los pueblos más bonitos del interior de Cantabria en Liérganes, localidad incluida en la lista de los Pueblos más bonitos de España, ubicado en la comarca de Trasmiera y rodeado de pequeñas colinas, entre ellas las conocidas como “Tetas de Liérganes”.

De todas las localidades que componen esta ruta por aquellos pueblos de Cantabria alejados de la costa, quizá sea Liérganes el que cuente con un mayor conjunto monumental, lo que le ha valido para ser declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1978. Además de hermosas casonas de los siglos XVII y XVIII, en Liérganes tenemos varias iglesias, como las de San Sebastián o la de San Pedro ad Vincula, y palacios como el de La Rañada o la Casa de los Cañones. Mención aparte merece el impresionante Palacio de Elsedo, barroco y que alberga un Museo de Arte Contemporáneo con obras de importantes artistas.

Por tener, Liérganes cuenta hasta con una leyenda, la del hombre-pez, personaje que tiene su propia escultura junto al bello puente de la localidad.