Es pequeña, pero acoge algunas de las mejores muestras de arquitectura mudéjar de toda España. Te proponemos una ruta por la ciudad de Teruel para conocer su impresionante conjunto monumental.
Se conoce con el término de “mudéjares” a los musulmanes que se quedaron en territorio cristiano tras la reconquista. Su huella quedó plasmada entre los siglos XII y XVII en el llamado “Arte mudéjar”, siendo la arquitectura uno de los campos donde nos dejaron algunas de las mejores muestras de este arte. Aunque son muchos los lugares de España en los que es posible apreciar bellísimas construcciones mudéjares, Aragón cuenta con algunos de los mejores ejemplos de este estilo, declarado en 1986 como Patrimonio de la Humanidad. Hoy nos acercaremos a una de las ciudades de Aragón que han alcanzado justa fama por su impresionante conjunto arquitectónico mudéjar: Teruel.
Lugares imprescindibles que ver en una ruta por la ciudad de Teruel
Al tratarse de una ciudad pequeña, puede que pienses que una visita a Teruel te llevará poco tiempo. Sin embargo, son tantos los monumentos y rincones con encanto que esconde la ciudad aragonesa que será mejor que te tomes la visita a la ciudad con mucha calma. A continuación, te hablamos de algunos lugares imprescindibles que no puedes pasar por alto si decides visitar Teruel.
Leyenda de los Amantes de Teruel y Mausoleo
Teruel, además de por su importante concentración de arte mudéjar, también es conocida por una leyenda, la de sus famosísimos amantes, Juan Diego Martínez de Marcilla e Isabel de Segura. Pero ¿quiénes fueron Los amantes de Teruel y qué cuenta su leyenda? Pues bien, esta leyenda habla de dos jóvenes enamorados: ella, Isabel, rica; él, Juan Diego, pobre. El padre de Isabel no permitió que su hija se casara con Juan Diego, precisamente por su condición pobre. El joven pidió a su amada que le diera un plazo de cinco años para hacer suficiente fortuna y que de esta manera el padre de ella le aceptara. Poco antes de cumplirse el plazo, Isabel, al ver que su amado no regresaba y que su padre la presionaba, se casó con un rico pretendiente. Sin embargo, justo ese mismo día, llegó Juan Diego cuando la pareja ya se había casado. Así que decidió entrar sigilosamente por la noche en la habitación donde dormía el matrimonio y pidió a Isabel un beso con estas palabras “bésame, que me muero”. Ella se negó y él murió. Antes de que lo enterraran, Isabel dio a Juan Diego el beso que le había negado, y ella también murió.
Los amantes de Teruel se encuentran en un mausoleo junto a la Iglesia de San Pedro, lugar en el que se encontraba Juan Diego Martínez de Marcilla antes de que lo enterrasen, obra del escultor Juan de Ávalos. Un detalle que llama la atención de la escultura de los amantes es que sus manos se buscan, pero no llegan a rozarse.
Escalinata del Óvalo
Si llegas a la ciudad de Teruel en tren, antes de entrar en el casco histórico, lo primero que verás será la conocida como “Escalinata del Óvalo”. Se trata de unas preciosas escalinatas diseñadas por José Torán en el año 1921, de estilo neomudéjar, tal y como se puede apreciar en los materiales empleados en su construcción como el ladrillo o la cerámica vidriada. Del conjunto, llama la atención un altorrelieve de Aniceto Marinas cuyos protagonistas son, como no podía ser de otro modo, los famosos amantes.
Torre de El Salvador
Tras acceder al casco histórico, te recibirá la Torre de El Salvador, la primera de las torres de estilo mudéjar que encontrarás en Teruel. Se trata de una construcción del siglo XIV con paso inferior para peatones y adornada con objetos decorativos de influencia islámica. La torre alberga el Centro de Interpretación de la Arquitectura mudéjar, lugar en el que podrás conocer mejor lo que significó el arte y la arquitectura mudéjar para la ciudad. Merece mucho la pena subir a lo alto de la torre desde donde disfrutarás de unas magníficas vistas.
Iglesia de San Pedro
Como decíamos al comienzo, el mausoleo de los Amantes de Teruel se encuentra junto a la Iglesia de San Pedro, templo del siglo XIV que se compone de una única nave con capillas laterales. De gran belleza son el ábside y el retablo de estilo renacentista del altar mayor. La Torre de San Pedro sería otro formidable ejemplo de las joyas mudéjares de Teruel y la más antigua de cuantas encontrarás en la ciudad aragonesa.
Plaza de El Torico
Para muchos, la Plaza de El Torico es el corazón y centro neurálgico de Teruel y, sin duda, una de las más animadas y con más ambiente de la ciudad. Bares, restaurantes y tiendas conviven en esta plaza adoquinada con edificios modernistas, entre los que destacan la Casa del Torico, la Casa la Madrileña y Casa Ferrán. Sin embargo, el más fotografiado y quien se lleva todas las miradas es “El Torico”, una pequeña estatua de un toro, de apenas 50 cm, asentada sobre una columna en una fuente central de la plaza y que tiene que ver con la creación de la ciudad.
Catedral de Santa María
Una de las joyas arquitectónicas de Teruel es la Catedral de Santa María de Mediavilla, uno de los mejores ejemplos de estilo mudéjar de España. De hecho, elementos de la catedral como su magnífica torre o el cimborrio fueron declarados Patrimonio Mundial por la Unesco en 1987. Mención aparte merece la techumbre de la catedral del siglo XIII (declarada también Patrimonio de la Humanidad por la Unesco) con espectaculares pinturas que reflejan la sociedad de la época en la que se mezclaban las culturas judía, musulmana y cristiana. La torre de la catedral está considerada como uno de los primeros edificios de estilo mudéjar que se construyeron en Teruel.
Monumentos cerca de la Catedral de Teruel: En los alrededores de la Catedral se alzan otros edificios importantes de la ciudad como la Casa del Deán, magnífico palacio del siglo XVI, el ayuntamiento, el Convento del Sagrado Corazón o el Museo de Arte Sacro, donde podrás admirar una importante colección de pintura gótica.
Torre de San Martín
Otro de los numerosos ejemplos del arte mudéjar con los que cuenta Teruel. Se trata de una construcción del siglo XIV que sirvió como torre vigía y que daba paso a la antigua morería. Destacan varios elementos decorativos que adornan la torre como piezas cerámicas en verde y blanco y estrellas de ocho puntas.
Acueducto de los Arcos y Viaducto viejo
Un poco más alejados del centro histórico de la ciudad nos sorprenden dos construcciones muy interesantes. La primera es el Acueducto de los Arcos, viaducto levantado a mediados del siglo XVI que servía para llevar el agua a la ciudad, declarado Bien de Interés Cultural. El segundo es el conocido como Viaducto viejo, magnífica obra de ingeniería de principios del siglo XX y un lugar ideal para pasear y disfrutar de las magníficas vistas que nos ofrece.