Hace apenas 25 años, viajar era un auténtico lujo. Las familias solían realizar un viaje al año y generalmente a destinos nacionales. Con la aparición de las compañías aéreas de bajo coste y los portales orientados a compartir casa o coche, viajar empezó a ser una actividad para todos los públicos.

Cuando comenzamos el año 2020, nada hacía presagiar que los viajes se iban a cortar de raíz. La mayoría de nosotros estábamos ya planeando cuales serían los viajes que haríamos a lo largo del año y que destinos serían los próximos que visitaríamos. Pero llegó el coronavirus y lo puso todo patas arriba.

Según los expertos, los viajes pasarán por dos fases: una tras el confinamiento y otra cuando llegue la vacuna. Estas son algunas de las hipótesis de las que se están hablando de cómo será viajar después del confinamiento.

Destinos:b> Muchos recordarán los años en los que viajar era coger el coche e ir con la familia a conocer algún pueblecito o paraje cercano al lugar en el que vivíamos. Una vez allí, el viaje consistía en disfrutar unas horas del paisaje, comer un bocadillo y regresar a casa en el mismo día. Pues bien, todo parece indicar que los viajes después del confinamiento serán algo parecido. Será una vuelta a los orígenes. Tras el confinamiento, y tras las interminables horas que hemos pasado encerrados entre cuatros paredes, disfrutaremos sólo con el hecho de salir y estar al aire libre, aunque el viaje no sea a destinos exóticos o lejanos.

Los viajes que haremos serán de corta duración (muchos serán de ida y vuelta en el mismo día) y a lugares cercanos. Los destinos nacionales serán los elegidos por la inmensa mayoría de la población. Buscaremos espacios abiertos y poco masificados. La naturaleza será la protagonista en muchos de los viajes que realicemos. Estar al aire libre, tras tantos días confinados, será algo que valoraremos mucho. Se cree que el turismo rural ganará mucho protagonismo frente al urbano. Volveremos a un turismo más sostenible.

Se cree que puede haber una especie de solidaridad en los destinos que elijamos cuando viajar sea mucho más seguro y busquemos aquellos que más han sufrido con la crisis del coronavirus.

Desplazamientos: No será nada fácil organizar y gestionar los desplazamientos en transporte público cuando acabe el confinamiento y la gente empiece de nuevo a coger autobuses, trenes y aviones. Se supone que guantes y mascarillas serán dos elementos importantes para poder utilizarlos.

Lo que sí está claro es que el coche se impondrá como medio de transporte. Será el que más se usará para viajar, al no entrar en contacto nada más que con los miembros de la familia. Aquellos que tengan autocaravanas serán unos de los grandes privilegiados, ya que podrán disfrutar del destino sin necesidad de tener que compartir medio de transporte ni alojamiento.

Algunas aerolíneas ya están diseñando cómo serán los viajes en avión cuando acabe el confinamiento. Quizás se reduzca el número de viajeros en los aviones, aunque posiblemente esto no sea rentable para muchas de las compañías aéreas. Los embarques se harán en grupos reducidos y se acabarán las multitudes de pasajeros en la puerta de embarque. Posiblemente, esto provocará que tengamos que llegar con bastante tiempo de antelación cuando necesitemos coger un vuelo. Cuando estemos a bordo, se cree que se suprimirán varias de las acciones en las que la tripulación entraba en contacto con el pasajero, como por ejemplo la venta a bordo.

Alojamientos: Los alojamientos son otra de las patas importantes sobre las que se asienta el turismo. Se supone que aquellos alojamientos que más minuciosos sean con las medidas de seguridad, serán los que elijan los viajeros. En todos veremos el uso de mascarillas, guantes y geles de limpieza de manos.

Posiblemente, en los primeros días tras la vuelta a la normalidad, los alojamientos cerrarán muchos de los espacios comunes, como el comedor o zonas de juegos para niños, o se controlará que no se produzcan masificaciones de huéspedes en estos lugares compartidos. Quizás haya una especie de rotación con las habitaciones y aquellas que han sido usadas se cierren durante algunos días para su desinfección. Durante un tiempo tampoco se llevarán a cabo actividades grupales como excursiones.

Se cree que este verano serán los alojamientos rurales los grandes beneficiados. Muchas personas buscarán casas rurales en pueblos pequeños y poco masificados que cuenten con un gran jardín y, si puede ser, con piscina.

Actividades: Por supuesto que las actividades en grupo serán muy raras cuando comencemos a viajar de nuevo. Este verano buscaremos realizar actividades en solitario o con nuestro círculo familiar: senderismo, paseos en bicicleta, buceo, lectura al aire libre, observación de aves o pesca son algunas de las actividades que realicemos durante nuestras vacaciones.

Viaje tipo: Por lo tanto, el viaje tipo tras el confinamiento será aquel en el que primen los destinos nacionales sobre los internacionales; elegiremos lugares que se encuentren cerca de casa y nos desplazaremos hasta allí en coche particular; buscaremos casas o alojamientos rurales en pueblos pequeños, poco masificados y rodeados de abundante naturaleza; tendremos en cuenta que el lugar en el que nos alojemos sea estricto con las medidas de seguridad; nos inclinaremos por realizar actividades al aire libre y si puede ser en un entorno natural.

Todas estas son sólo hipótesis sobre cómo será viajar después del confinamiento. Lo que sí está claro, y podemos afirmar con toda seguridad, es que esta crisis va a hacer que nuestra forma de actuar en todos los ámbitos de nuestra vida será muy distinta a nuestro comportamiento de hace apenas un par de meses.