El enamoramiento con Puebla de Sanabria va por fases: a lo lejos se divisan las murallas y el castillo, y entonces eres consciente de que esta localidad zamorana esconde verdaderas joyas arquitectónicas. Según cruzas el largo puente sobre el rio Tera, empiezas a convencerte de que en lo alto de la loma te espera un lugar muy especial. Mientras asciendes por la empinada cuesta que te lleva hasta el casco antiguo, aprietas el paso para poder disfrutar cuanto antes de los tesoros que esconde Puebla de Sanabria. Cuando llegas arriba, confirmas que esta villa zamorana no defrauda al visitante.

Cerca de la provincia de Ourense y de la vecina Portugal, en la comarca de Sanabria, se encuentra Puebla de Sanabria. Hacer una ruta por Puebla de Sanabria es sinónimo de calles empedradas, casonas solariegas de piedra y madera y balconadas repletas de flores; de añejas construcciones que aún se conservan en un estado magnífico; de gentes que viven el día a día tranquilos, disfrutando de un entorno natural excepcional… en definitiva, hacer una ruta por Puebla de Sanabria es sinónimo de disfrutar de un pueblo que ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico y de adentrarse en uno de los pueblos más bonitos de España.

Casco histórico de Puebla de Sanabria

Como decíamos al comienzo, mientras se atraviesa el puente sobre el río Tera es habitual levantar la cabeza para contemplar algunas de las construcciones que componen el casco antiguo, como la muralla o el Castillo de los Condes de Benavente.

Lo primero que sorprende cuando te adentras en el casco antiguo de Puebla de Sanabria es su magnífico estado de conservación. Pareciera como si el importante pasado medieval de la población se hubiera quedado congelado en el tiempo. Calles empedradas que forman un entramado con salida a miradores, a la muralla o a importantes construcciones. En esas calles que suben, entran y salen es habitual la presencia de casas de piedra y madera, algunas de ellas repletas de flores. Debido a esa importancia de Puebla de Sanabria en la edad media, hay algunas casonas que destacan entre las demás y en las que todavía podemos ver los escudos de las importantes familias que las habitaban. Sin embargo, casi todas las casas del casco histórico tienen algo que las hacen especiales y que invitan a hacer una pequeña parada.

Murallas de Puebla de Sanabria

Testigos mudos de ese trascendente pasado medieval de Puebla de Sanabria son las piedras que componen las murallas de Puebla de Sanabria, levantadas en los siglos XII y XIII y que, junto al castillo, se encargaban de proteger la localidad. Aunque algunos elementos como las puertas de acceso se perdieron con el tiempo, hoy las murallas siguen hablando del importante pasado de la villa y se convierten en uno de los mejores miradores de la localidad zamorana.

Castillo de los Condes de Benavente

Sin duda, la construcción más representativa de Puebla de Sanabria. En lo alto de la colina en la que se asienta el casco histórico, y asomándose al vacío, se encuentra el imponente castillo de Sanabria, conocido como Castillo de los Condes de Benavente.

El castillo fue construido en el siglo XV por los Condes de Benavente, y hoy en día se encuentra en un excepcional estado de conservación. Su estratégica posición y las dimensiones sorprenderían en su día a los atacantes y sorprenden aún hoy al visitante. Destaca la torre del homenaje, que popularmente es conocida como “El Macho”.

El castillo ha tenido diversos usos: residencia, fortaleza o cárcel, entre otros. Hoy acoge diversas exposiciones y el Centro de Interpretación de las Fortificaciones. Además, puede ser un buen lugar para comenzar cualquier ruta por Puebla de Sanabria, pues aquí está la Oficina de Turismo.

Plaza Mayor

La Plaza Mayor es el lugar que concentra algunos de los monumentos más importantes de Puebla de Sanabria. En ella, además de las tradicionales recias casas de piedra que ya hemos visto diseminadas por el casco histórico, hay tres edificios de gran valor: el ayuntamiento, la Iglesia de Santa María del Azogue y la Ermita de San Cayetano.

Ayuntamiento: En la plaza mayor reconocerás el ayuntamiento por dos torres gemelas que acompañan al edificio, como si de dos guardaespaldas se tratasen, y por los pórticos de las dos plantas del ayuntamiento. Es una construcción del siglo XV.

Iglesia de Santa María del Azogue: En la Plaza Mayor está la Iglesia de Santa María del Azogue. Es del siglo XII y, como tantas otras construcciones de España, presenta varios estilos debido a las reformas que se realizaron en siglos posteriores, siendo el románico la base principal y añadiéndose posteriormente elementos góticos y renacentistas.

Lo que más llama la atención del exterior de la Iglesia de Santa María de Azogue es la puerta principal. Aconsejamos acercarse a ella para descubrir interesantes elementos que no suelen aparecer en este tipo de construcciones como cuatro figuras ataviadas con distintos ropajes, dos de las cuales reflejan a Adán Y Eva. Por encima de la portada sobresale una pequeña cabeza de hombre. También destaca la Torre del Campanario. En el interior hay que hablar de un órgano de finales del XVIII, una interesante pila para el bautismo y algunas lápidas funerarias que fueron descubiertas en el año 1995.

Ermita de San Cayetano: Junto a la iglesia está la Ermita de San Cayetano. Edificio barroco del siglo XVIII que llama la atención por su magnífica fachada.

Parque Natural Lago de Sanabria

Muy cerca de Puebla de Sanabria tenemos el Parque Natural Lago de Sanabria, un bellísimo lugar declarado Parque Natural en el año 1978 y en cuyo interior está el Lago de Sanabria, único lago de origen glaciar de España y uno de los más grandes de Europa con sus 3,4 kilómetros cuadrados.

El lago posee varias playas de arena que invitan a darse un chapuzón en verano. En el parque se pueden realizar un gran número de actividades como la práctica de deportes acuáticos, senderismo, paseo en catamarán, tomar el sol o bañarse en las frías aguas del lago.

Recomendamos visitar Ribadelago viejo, lugar recordado por la trágica noche del 9 de enero de 1959, cuando las aguas de la presa de Vega de Tera anegaron este pueblo. Subir hasta la Laguna de los Peces puede ser también una gran idea, no solo por la belleza del lugar, sino también por los hermosos paisajes que nos acompañan hasta alcanzar este destino.