Qué ver en el Parque Natural de la Sierra de Cazorla

Situado al este de la provincia de Jaén, la Sierra de Cazorla es un extenso espacio que esconde maravillosos tesoros naturales en forma de ríos, cascadas, cuevas, embalses…, preciosos parajes cubiertos por enormes masas arbóreas y una fauna rica y diversa. Te contamos cuales son los lugares imprescindibles que hay que ver en este mágico lugar del sur de la península conocido como Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas.

Pueblos con encanto en la Sierra de Cazorla

Además de impresionantes joyas naturales que dejan al viajero con la boca abierta, en los límites del Parque Natural de la Sierra de Cazorla están algunos de los pueblos más bonitos de la provincia de Jaén.

Cazorla

Uno de los pueblos más importantes de la provincia y que además da nombre al parque es Cazorla. Lo primero que llama la atención del visitante cuando llega a esta localidad jienense es el mar de olivares que la rodea. Lo segundo, la estampa de cientos de casas blancas que trepan por la ladera y que son coronadas por una fortaleza. Se trata del Castillo de Yedra, construcción de origen árabe que nos regala hermosas vistas del pueblo y su entorno. Sin embargo, el lugar más sorprendente de Cazorla son las ruinas de la Iglesia de Santa María con la bóveda del río Cerezuelo bajo ella. Muy cerca de Cazorla se encuentra La Iruela, pequeño pueblo que tiene como construcción más destacada un castillo mozárabe que hace equilibrios imposibles sobre un peñasco.

Segura de la Sierra

Un precioso entorno natural envuelve a Segura de la Sierra, pueblo situado en la zona norte del parque que cuenta con un importante conjunto monumental. Un paseo por sus calles nos permitirá descubrir las puertas de las murallas, los baños árabes, la Iglesia de Santa María del Collado, la Fuente imperial y la Casa de Jorge Manrique, ciudadano ilustre de Segura de la Sierra. Sin embargo, el monumento más importante del municipio es su castillo (como no podía ser de otra manera en la provincia con más castillos de España). Se trata de una construcción de origen islámico que acoge exposiciones en su interior. Si lo que buscamos es disfrutar de una preciosa panorámica de la zona, la mejor opción es acercarse hasta el Mirador de Peñalta.

Quesada

Quesada es un pueblo de la comarca del Alto Guadalquivir formado por estrechas callejuelas que son decoradas con cientos de flores por sus habitantes. En su casco histórico descubriremos los restos de su antigua muralla, arcos medievales, entre los que destaca el Arco de los Santos, la Iglesia de San Pedro y San Pablo del siglo XV, y el Museo Zabaleta, centrado en la figura del pintor Rafael Zabaleta.

En las proximidades de Quesada se encuentra la aldea de Tíscar, una de las visitas imprescindibles de la Sierra de Cazorla por tres razones: el Castillo de Tíscar, el Santuario de Tíscar, lugar de peregrinación situado junto al castillo y, en especial, la Cueva del Agua (también conocida como Gruta de las Maravillas), espectacular gruta a la que se llega a través de un túnel formado en la roca en donde el agua avanza creando espectaculares fuentes y cascadas.

Paisajes destacados en la Sierra de Cazorla

Aunque la Sierra de Cazorla puede presumir de pueblos encantadores, no cabe duda de que sus auténticos protagonistas son los elementos naturales que la forman. Te hablamos brevemente de algunos de los más destacados:

Cerrada de Utrero: Espectacular desfiladero cerca de Cazorla que ha sido tallado por la acción del Río Guadalquivir, dejando a su paso escarpadas paredes rocosas y preciosos saltos de agua, siendo el más famoso y espectacular de todos ellos la Cascada de Linarejos, también conocida como Cola de Caballo. Se puede llegar hasta este lugar realizando una sencilla ruta senderista circular de apenas dos kilómetros y 45 minutos de duración.

Nacimiento del Guadalquivir: Nadie diría que el espectacular río que baña la ciudad de Sevilla sea el mismo que el que nace en la Cañada de las Fuentes, en el término municipal de Quesada. Pero así es, el Guadalquivir comienza su viaje en la Sierra de Cazorla y no descansará hasta verter sus aguas en el Océano Atlántico. Se puede llegar hasta este emblemático lugar caminando desde el legendario Puente de las Herrerías.

Embalse del Tranco: Una de las primeras paradas del Guadalquivir en su caminar es el Embalse de El Tranco de Beas, uno de los más grandes de España y considerado como el centro neurálgico del parque. Cuando el nivel de sus aguas desciende, se puede apreciar como emerge el Castillo de Bujaraiza sobre una pequeña isla. Además de pasear por los senderos que rodean el pantano, en sus aguas se pueden practicar varios deportes acuáticos.

Charco de la Pringue: Otro de los lugares mágicos que ha creado el cauce del Guadalquivir a su paso por el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas es El Charco de la Pringue o Charco del Aceite. A pesar de este nombre tan poco “sugerente” se trata de una bonita piscina natural a la que se acercan los habitantes de la zona para darse un baño en los días de más calor del verano. Posee un área recreativa con aparcamiento, merendero y chiringuito, entre otros servicios, que lo convierten en un lugar ideal para pasar un día de esparcimiento.

Ruta del río Borosa

Hemos querido dejar para el final el que quizá sea el mejor plan que se puede hacer en la Sierra de Cazorla: realizar la ruta de senderismo del río Barosa. Esta ruta avanza acompañando al río Borosa, afluente del Guadalquivir, hasta su nacimiento. El recorrido tiene 11 kilómetros (22 kilómetros ida y vuelta) y nos deja a su paso varios lugares que desprenden magia por los cuatro costados como son la Cerrada de Elías, las Cascadas del Salto de los Órganos y la Calavera, el Embalse de Aguas Negras, enclave en el que nace el río Borosa, y la Laguna de Valdeazores.