Qué ver en Oia

Santorini es una de las islas más importantes de Grecia. Su fisionomía se encuentra marcada por la enorme caldera de un volcán. En una de las laderas del cráter, en el extremo norte de la isla, se sitúa la que está considerada como una de las poblaciones más bonitas de toda Europa, Oia. Este pequeño pueblo, de apenas 1500 habitantes, es uno de los mejores ejemplos de esa arquitectura tan típica de Grecia de casas de un blanco impoluto e iglesias con cupulas azules, que miran al luminoso mar mediterráneo. Remata esa imagen de perfección unos atardeceres mágicos e inigualables que se disfrutan desde cualquier rincón del pueblo.

Casco histórico de Oia

El casco histórico de Oia viene a ser esa imagen de típica localidad griega que tantas veces hemos visto en películas o documentales. Callejuelas estrechas y empedradas que suben y bajan por la ladera de la caldera. Rincones escondidos con mucho encanto. Casas de un blanco inmaculado que miran al mar adornadas con flores. Cúpulas azules de las iglesias, destacando por encima de otras construcciones. Acantilados que emergen de las aguas como si fueran guardianes custodiando un tesoro. Molinos blancos de viento. Coquetos cafés, tabernas donde probar las delicias de la isla, museos, pequeñas tiendas de artesanía, galerías de arte… Imágenes que se graban en la retina. Atardeceres de ensueño. En definitiva, un casco antiguo que invita a perderse y a deambular sin itinerario marcado, a dejarse llevar.

Librería Atlantis Books

Hay algunos lugares de Oia en donde sí que hay que hacer una parada. Uno de ellos es la librería Atlantis Books. Abierta en el año 2004, se ha convertido en uno de los tesoros más buscados de Oia. Esta pequeña librería destaca tanto por el continente (una de las curiosas casas-cuevas de la localidad), como por su contenido (estanterías repletas de un amplio abanico de libros en diferentes idiomas). Un clásico de Santorini y una de las librerías más bonitas del mundo.

Iglesias de Oía

Otra de las imágenes más famosas de las islas griegas en general y de Oia en particular es la de las cúpulas azules de sus iglesias. La Iglesia ortodoxa de Panagia Platsani es una de las más bonitas de Santorini. Ubicada en una de las plazas principales de la localidad, destaca por el blanco luminoso de su fachada, el azul de la cúpula y por el curioso conjunto de seis campanas situado en la parte derecha de la iglesia. El interior está bellamente ornamentado con pinturas, esculturas y detalles dorados. Las Iglesias de Agios Spiridonas y Anastasios son el ejemplo perfecto de iglesias blancas con cúpulas azules. Por su lado, la Iglesia de Agios Georgios se desmarca un poco de estas pautas, ya que su fachada presenta un color amarillo muy particular.

Castillo

Otra de las construcciones destacadas de Oia es su castillo. Se trata de una fortaleza bizantina del siglo XV que fue levantada para proteger a la población de los ataques piratas. Actualmente, es poco lo que todavía permanece en pie de esta construcción, apenas las ruinas de lo que un día fue su muralla. Sin embargo, la razón por la que cada día suben hasta el castillo un importante número de turistas nada tiene que ver con su importancia arquitectónica o histórica, sino por ser el mejor lugar de Oia para disfrutar de un atardecer único.

Llegados a este punto, hay que hablar de una de las razones principales por las que Oia se ha puesto de moda en los últimos años: sus mágicos atardeceres. Poco antes de que el astro rey se oculte, son muchos los turistas que van buscando un lugar en Oia donde poder disfrutar del que está considerado como el mejor atardecer de la isla y uno de los más impresionantes de todo el Mediterráneo. El único problema es que los atardeceres de Oia se han hecho tan famosos que cuando cae la tarde, cualquier punto de la localidad está demasiado masificado, restando algo de magia al momento.

Bahía de Ammoudi

Cerca del castillo, a los pies de Oia, se encuentra la Bahía de Ammoudi. En ella, un pequeño pueblo marinero y un puerto, protegidos por las paredes rocosas del acantilado, se convierten en el lugar ideal para darse un chapuzón o sentarse en una taberna a degustar buen pescado, mientras se observa como los pequeños botes de pescadores regresan de faenar. Para llegar hasta este idílico lugar hay que bajar los cerca de 300 escalones de una larga escalinata. Sin embargo, la recompensa merece la pena.

Otro lugar para darse un baño es la bonita playa de Katharos, a algo más de un kilómetro de Oia, con pequeño arenal de guijarros y aguas cristalinas ideales para el buceo.

Caldera de Santorini

Las erupciones volcánicas se encuentran detrás de la fisionomía de la isla. Estas explosiones de lava son las causantes de que Santorini esté formada por cinco islas: Santorini (la más grande), Nea Kameni, Palea Kameni, Therasia y la minúscula Aspronisi. Una de las excursiones más demandadas es la que parte en barco de la Bahía de Ammoudi y recorre varios puntos de la caldera de Santorini. Algunos de las paradas más sorprendentes son las que nos dejan en las islas volcánicas de Palea Kameni y Nea Kameni. Una excursión diferente para acercarse a Santorini desde otro punto de vista.

Sendero de Fira a Oia

Una de las mejores maneras de tomar contacto con la isla es realizando el sendero que parte de Fira (ciudad más importante de la isla) y termina en Oia. Se trata de una caminata de 10 kilómetros que se puede recorrer en unas 3 o 4 horas. El camino avanza por el borde de un acantilado y no presenta demasiada dificultad. A lo largo de la ruta saldrán a nuestro paso varias iglesias y atravesaremos algunas localidades de gran belleza como Imerovigli. Sin embargo, son las vistas que nos regala el paisaje a cada paso que damos, lo que convierten esta ruta en uno de los imprescindibles que hacer en Oia.