Dominado por una gran mole rocosa conocida como “La Rocca”, Cefalú está considerado como uno de los pueblos más bonitos de Sicilia, gracias, entre otras cosas, a su encantador centro histórico y a su bonita playa. Viajamos a la famosa isla italiana para conocer cuáles son los lugares imprescindibles que tenemos que ver sí o sí en Cefalú.
Lugares más importantes que ver en Cefalú
Cefalú se encuentra situado en la costa norte de la isla italiana de Sicilia. Su esencia mediterránea se refleja en un centro histórico repleto de encantadores rincones y en una zona de playa tomada por vecinos de la localidad y turistas cuando llegan los meses de verano. Un día es suficiente para conocer los lugares más bonitos que ver en Cefalú, por lo que esta localidad puede convertirse en una parada interesante si estamos realizando un recorrido por Sicilia y añadirla a otros lugares turísticos de la isla como Palermo, Agrigento o Siracusa.
Centro histórico de Cefalú
Una de las razones principales para visitar Cefalú es para recorrer su coqueto centro histórico de estrechas callejuelas empedradas y en donde es posible aún divisar algunas escenas típicas de la vida siciliana (vecinos hablando en las calles de sus quehaceres diarios, ropa tendida al sol, balcones repletos de flores, pequeñas tiendas de las de toda la vida…). Entre las calles más llamativas del casco antiguo de Cefalú se encuentran la Via Porpora, la Via Ortolani di Bordonaro, la Via Vittorio Emanuele y el Corso Ruggero.
Piazza del Duomo
Entre los atractivos que encontramos en la parte vieja del pueblo hay que destacar a la Piazza del Duomo o Plaza de la Catedral. El lugar invita a relajarse y a disfrutarlo de diferentes formas: tomando algo en sus terrazas, capturando con la cámara la estampa de sus edificios más importantes como el ayuntamiento, el seminario Vescovile, el Palazzo Pirajno o el Palazzo Maria, y, sobre todo, entrando en la catedral para admirar una pequeña joya de la que te hablamos a continuación.
Catedral de Cefalú
El origen arabo-normando de la localidad tiene su mejor muestra en la Catedral o Doumo de Cefalú. Mandada construir por Ruggero II en la primera mitad del siglo XII, en su fachada sobresalen dos esbeltas torres que nos regalan unas maravillosas vistas del pueblo. Su interior guarda un magnífico mosaico bizantino con un Cristo Pantocrátor que se convierte, sin duda, en el tesoro mejor custodiado de la catedral. Además, aunque de pago, merece la pena conocer el bonito claustro de este templo siciliano declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Osterio Magno
Situado en el Corso Ruggero, Osterio Magno es otra de las construcciones de Cefalú relacionadas con la figura de Ruggero II, ya que fue residencia de este rey normando en el siglo XII. De su estructura destacan las ventanas y la parte del Palazzeto bicromático, llamado así por la mezcla de dos colores que le otorgan los distintos tipos de piedra que se emplearon en su construcción.
Bastione di Capo Marchiafava
Cefalú cuenta con varios lugares que nos ofrecen una bella panorámica de la localidad y de los alrededores. Uno de los mejores lugares para disfrutar de unas vistas únicas es el Bastione di Capo Marchiafava, estructura defensiva del siglo XVII cercana a la Via Ortolani di Bordonaro Carlo.
Lavadero público medieval
En la Via Vittorio Emanuele encontramos uno de los lugares con mayor encanto del pueblo, el lavadero medieval. Tras descender una escalinata se llega a una zona con varias pilas que se usaban para lavar la ropa. A pesar de su antigüedad, siglo XVI, el manantial todavía corre y la estructura sigue presentando a día de hoy un magnífico estado de conservación.
Porta Pescara
La Porta Pescara, construcción que pertenecía a la antigua muralla de Cefalú, se encarga de hacer de frontera entre el entramado de callejuelas del casco histórico y la zona del puerto y la playa.
Cefalú y el mar
Como buena localidad siciliana, Cefalú se encuentra íntimamente ligada al mar. Tras cruzar la Porta Pescara, las empedradas calles del casco viejo dejan todo el protagonismo al líquido elemento. La estampa del puerto viejo rodeado de coquetas casas de pescadores se convierte en amor a primera vista. En los meses de verano, turistas y locales se acercan a esta zona del pueblo para disfrutar de un agradable día de relax. La playa de Cefalú, con forma de media luna y aguas transparentes, invita al baño o a caminar por su arena dorada. Un apunte para los más cinéfilos: aquí se rodaron algunas escenas de la emotiva película italiana “Cinema Paradiso”, por lo que quizá entre los bañistas te encuentres con el pequeño Totó o con su amigo Alfredo.
Rocca de Cefalú
No podemos terminar la visita a Cefalú sin hablar de la Rocca, enorme mole de piedra, auténtico icono de la localidad. Aunque la ascensión hasta ella puede ser un poco agotadora, las maravillosas vistas que se disfrutan desde algunos de los miradores situados en lo alto de la Rocca de Cefalú, compensa con creces el esfuerzo realizado. Además, de por las vistas, en este lugar se encuentran los restos del antiquísimo Templo de Diana, del siglo IX a.C.