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Albarracín, uno de los pueblos más bonitos para visitar en España


¿Qué debería tener un pueblo para ser considerado como “un pueblo bonito”? Seguramente un entorno natural que nos enamore. También contribuiría a ello que la fisionomía y estructura del pueblo nos impacte. Sin duda, un punto a su favor sería que tenga muchas calles estrechas, de corte medieval o con un particular encanto. Por supuesto, sería importante que cuente con un conjunto arquitectónico destacable.

Datos Útiles


País: España
Idioma: Español
Zona Horaria: GMT +1
Moneda: Euro
Requisitos de entrada:

¿Y qué debería tener un pueblo para ser considerado como uno de los más bonitos de España? Pues para saberlo, viajamos en esta ocasión a Albarracín, un lugar que enamora a cualquier viajero que pone el pie en él.

Albarracín es un pueblo de Teruel que cumple con muchos de los requisitos de los que hablábamos en la introducción para ser considerado como “bonito”: tiene un entorno natural que nos enamora en la Sierra de Albarracín y junto al “Paisaje protegido de los Pinares de Rodeno”. Sobre un peñasco y rodeado del río Guadalaviar, la estructura del pueblo impacta al visitante. Por supuesto, también cumple con el requisito de poseer calles estrechas, empinadas y medievales con un encanto muy especial. Y, sin duda, también obedece a lo de tener un conjunto arquitectónico importante, como lo demuestran la muralla, el castillo o la Catedral del Salvador, por poner solo tres ejemplos. Así que no nos extendemos más con las bondades de esta población turolense y vamos a conocer todo lo que hay que ver en Albarracín, uno de los pueblos más bonitos de Teruel y de toda España.

 

Qué ver en Albarracín

Albarracín todavía conserva en sus empinadas calles la influencia y el aroma del dominio árabe, ya que no sería hasta finales del siglo XIII, en 1284, cuando fue conquistada por Pedro III de Aragón. El conjunto defensivo de Albarracín tiene que ver con la idea de proteger al pueblo tras la reconquista. Se encuentra a unos 30 minutos al noroeste de la ciudad de Teruel y tiene dos partes claramente diferenciadas: la zona alta, donde está el casco histórico, y la zona baja, por donde discurre el Guadalaviar. En los últimos tiempos se ha extendido la voz de los encantos de esta localidad y son muchos los turistas que quieren acercarse a verla con sus propios ojos.

 

Construcciones defensivas de Albarracín

Muralla de Albarracín

Albarracín se encuentra protegido por un conjunto fortificado compuesto por muralla, castillo y varias torres de defensa. Una muralla abraza al pueblo y lo rodea. Lo que más llama la atención de esta construcción defensiva es ver como trepa por la ladera del peñasco. Si queremos apreciar la muralla en todo su esplendor, no nos queda más remedio que seguir el camino trazado por ella y concienciarnos de que tendremos que subir algunas empinadas cuestas. Sin embargo, la recompensa al llegar es enorme: una panorámica privilegiada

Torre del Andador: Si tuviéramos que destacar un elemento de entre los que componen la muralla, ese sería la Torre del Andador, una torre del siglo X de origen árabe que servía como punto de vigilancia. Otra torre famosa de Albarracín es la Torre de Doña Blanca.

Alcázar de Albarracín

El Alcázar es otra de las construcciones defensivas más importantes de Albarracín. También es de origen árabe y fue reconstruido en tiempos de Pedro III. Hoy en día, todavía se puede apreciar su esqueleto. Se puede visitar por medio de visitas guiadas.

 

Casco antiguo: calles importantes y casas emblemáticas de Albarracín.

Para comenzar o terminar la visita por Albarracín, nada mejor que darnos una vuelta por el casco antiguo para disfrutar de numerosos rincones con encanto, calles de una singular belleza y construcciones que nos dejan con la boca abierta. Una recomendación: nunca guardes la cámara mientras recorres el casco antiguo de Albarracín, nunca sabes cuando va a aparecer ante ti una construcción distinta o cuando te vas a encontrar con unas vistas espectaculares.

Como hemos comentado, el casco histórico de Albarracín se encuentra en la parte alta del pueblo, por lo que sus calles son empinadas para adaptarse a la ladera y las casas parecen agarrarse con uñas y dientes a la falda del peñasco, superponiéndose unas a otras. Uno de los aspectos que más llaman la atención del casco antiguo de Albarracín es ese color rojizo tan característico que muestran muchas de sus casas.

 

¿Qué calles y rincones no hay que perderse en Albarracín?: Son muchas las calles y rincones del pueblo que te sorprenderán como la calle Santiago, la calle Palacios, junto a la que encontramos un mirador con unas vistas preciosas, y el Rincón del Abanico.

¿Qué casas hay que ver en Albarracín?: Paseando por las medievales calles de Albarracín, saldrán a tu encuentro algunas casas singulares y de gran belleza. Una de ellas es la Casa Azul (o Casa Azagra), un edificio que parece querer llamar la atención del visitante con su color azul que se contrapone al tono rojizo monocromático de la mayoría de las construcciones del pueblo y que perteneció a una de las familias importantes de Albarracín, los Navarro de Azuriaga. Otro edificio que te va a sorprender por su estructura es la Casa de la Julianeta, de la que podrás tomar una preciosa imagen para tus redes sociales desde el Portal de Molina.

 

Monumentos y lugares importantes de Albarracín

Además de la muralla, el Alcázar y las calles y casas del casco antiguo, hay otros lugares que no te puedes perder si decides visitar Albarracín.

Catedral del Salvador

Sí, Albarracín, una localidad de unos mil habitantes, tiene catedral. La Catedral del Salvador de Albarracín se encuentra en el mismo lugar en el que existía una iglesia románica en el siglo XII. Sin embargo, el templo actual es de la primera mitad del XVI. Se trata de otro de los lugares de Albarracín al que se accede con visita guiada.

Plaza Mayor

En el corazón y centro neurálgico de Albarracín encontramos su bonita Plaza Mayor, en la que destaca el edificio del ayuntamiento, del siglo XVI, y donde sorprende un singular balcón en la esquina de una de las construcciones de la plaza que obliga de nuevo a sacar la cámara.

Otros monumentos que hay que ver en Albarracín son la Parroquia de Santa María y Santiago, la Casa de los Monterde, las Ermitas de San Juan y de Nuestra Señora del Carmen y el Museo del Juguete.

 

Sendero por el río Guadalaviar

Si dispones de tiempo, no te puedes ir de Albarracín sin hacer el sendero por el río Guadalaviar, un camino que discurre paralelo al río. Se trata de un recorrido fácil que te llevará una hora más o menos (esto depende de las paradas que hagas para disfrutarlo y para sacar preciosas imágenes del lugar y de las vistas que desde allí se tienen) y que pasa por varios puentes, molinos, pasarelas… todo ello rodeado de naturaleza.

 


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