6 bonitos paseos marítimos en España

Hemos seleccionado 6 paseos marítimos de España que, por su belleza, historia, importancia dentro de la ciudad, o simplemente por su ambiente especial, no sólo hay que conocerlos, sino que también hay que disfrutarlos, recorrerlos de arriba abajo y perdernos entre los cientos o miles de personas que cada día deambulan por ellos. Y es que, en un país como España, donde el turismo de playa es esencial, los paseos marítimos cumplen una función primordial. Así que nos ponemos en marcha para descubrir los paseos marítimosde playas tan famosas como Riazor, la Barceloneta, La Concha o la Playa de San Lorenzo.

Paseo marítimo de Barcelona

Nos acercamos hasta el mar Mediterráneo para conocer el Paseo Marítimo de Barcelona, el primero de los que recorreremos en la ruta de hoy.

El paseo marítimo de Barcelona comienza en el Maremágnum, junto a la plaza donde se encuentra la Estatua de Colón, y termina en el Puerto Olímpico. En total son 5 kilómetros de un paseo especialmente animado, tomado cada día por locales, turistas, paseantes, niños, mayores, corredores, ciclistas, patinadores, bañistas, bohemios y toda clase de fauna urbana que nos podamos imaginar.

Además de un extraordinario ambiente, caminando por el Paseo Marítimo de Barcelona nos encontraremos también con una gamba gigante, una enorme ballena de bronce, varios chiringuitos en los que poder tomar un refrigerio para combatir el calor, miles de veraneantes tomando el sol en la playa de La Barceloneta y pequeñas embarcaciones ancladas en el puerto esperando a adentrarse en las calmadas aguas del mediterráneo. No hay duda de que la ciudad condal tiene muchos atractivos, pero recorrer el Paseo Marítimo de arriba abajo es, seguramente, una de las mejores cosas que hacer en Barcelona.

Paseo marítimo de A Coruña

Cruzamos la península de este a oeste para llegar hasta otro de los paseos marítimos más bonitos de España, el Paseo marítimo de A Coruña.

Si bien recomendábamos recorrer entero el Paseo Marítimo de Barcelona, con el de A Coruña es mejor que te lo pienses dos veces. Y no porque no merezca la pena (merece la pena, y mucho), sino porque, con sus 13 kilómetros, estamos ante el paseo marítimo más largo de Europa. Su comienzo se sitúa en el Castillo de San Antón y finaliza en el Portiño. Entre medias están algunos de los monumentos y rincones más conocidos de la ciudad: la legendaria Torre de Hércules, la Playa de Riazor y el Paseo de los Menhires con los “Menhires por la paz”. Además, por la noche podemos deambular por el paseo bajo la luz de sus singulares farolas modernistas. Quizá nos equivocábamos y, tras conocer las maravillas que contiene el Paseo marítimo de A Coruña, está más que justificado recorrer cada uno de sus 13 kilómetros.

Paseo marítimo de Cádiz

Cádiz es una ciudad perfecta para pasar unos días de vacaciones porque lo tiene todo: luz, color, alegría, playas en las que descansar, magníficos monumentos, buena gastronomía y mucho, mucho más. Sin embargo, uno de los imprescindibles de Cádiz es su paseo marítimo, conocido como “El pequeño Malecón”, por su parecido con el famoso paseo de La Habana.

Recorrerlo nos permitirá descubrir algunos de los lugares más famosos de la ciudad como el Castillo de Santa Catalina, el Castillo de San Sebastián o la Playa de La Caleta. Incluso, puedes adentrarte en el casco antiguo y disfrutar de la Catedral de Cádiz (con su famosa cúpula dorada) o perderte por las calles del mítico barrio del Pópulo. Sin embargo, cualquier gaditano nos diría que para disfrutar de verdad de Cádiz y de su paseo marítimo, lo que tenemos que hacer es relajarnos y dejarnos sorprender por una de las más maravillosas puestas de sol de nuestro país.

Paseo Marítimo de Gijón

Los casi dos kilómetros del Paseo marítimo de Gijón se extienden a lo largo de la Playa de San Lorenzo. Este paseo junto a la playa más famosa de la ciudad puede comenzar en “La Cantábrica” y terminar en “El Tostaderu”, nombres estos con los que se conocen popularmente a las escaleras “0” y “16” de la playa. Si decidiéramos comenzar en “La Cantábrica”, podríamos aprovechar para visitar la Iglesia de San Pedro, edificio del año 1955 construido tras la destrucción del anterior templo durante la Guerra Civil. Y si nos cansamos de caminar, nada mejor que hacer una parada en algún bar o restaurante del paseo para reponer fuerzas con un buen cachopo o con un delicioso plato de pescado o marisco, acompañados, como no, de una botella de la famosa sidra asturiana.

Paseo marítimo de San Sebastián

Sin duda, una de las ciudades más bonitas de España es San Sebastián, siendo la Playa de la Concha su lugar más icónico. A veces da la sensación de que mientras paseamos por el Paseo marítimo de San Sebastián, van a aparecer de repente aquellos bañistas de comienzos del siglo XX, vestidos con los bañadores de la época, para darse un chapuzón en las aguas de la Playa de la Concha y que, cuando terminen su baño, se sentarán a charlar tranquilamente junto a la famosa barandilla blanca de 1910. Sin embargo, podemos dejar atrás a los felices bañistas de La Concha para conocer otros lugares de interés del Paseo marítimo de San Sebastián como la playa adyacente de Ondarreta, con la isla de Santa Clara como telón de fondo. Y así, paso a paso, casi sin darnos cuenta, llegaremos hasta el famoso “Peine del viento”, otro los iconos de la ciudad, obra del gran Eduardo Chillida.

Paseo marítimo de Alicante

Terminamos nuestro recorrido por algunos de los paseos marítimos más bonitos de España con el Paseo marítimo de Alicante.

Quizás el Paseo marítimo de Alicante (o Paseo de la Explanada) no sea, precisamente, el más largo de los que hemos recorrido hoy, pero las más de seis millones de teselas de colores de mármol que lo forman, simulando las olas del mar, lo convierten en uno de los más bonitos y especiales de entre los paseos marítimos que existen en España. Su final se sitúa en el Parque de Canalejas, junto al que están algunas de las construcciones más importantes de la ciudad como el Real Casino. Además, el animado ambiente del Paseo marítimo de Alicante a cualquier hora del día lo convierten en uno de los lugares preferidos por los alicantinos para pasar un rato agradable con la brisa del mar como compañero inseparable.