Sin embargo, lo que más seduce del Born a aquellos que se acercan a conocerlo es una mezcla de caos y silencio con la que descoloca a sus visitantes. Así es, en el Born puedes estar rodeado de cientos de turistas y, al doblar una esquina, encontrarte en una callejuela medieval totalmente vacía, donde pareciera que las viejas piedras hablaran; o abandonar el último local de moda lleno de gente hasta los topes y, a continuación, entrar en una tasca del barrio de las de toda la vida donde pasas un agradable rato hablando con el camarero de lo mucho que ha cambiado el barrio en los últimos tiempos.

Quizá ese contraste sea lo que más llame la atención de este barrio de Barcelona, pero el Born hay que recorrerlo de arriba abajo, desde el Parque de la Ciutadella hasta la Via Laietana, desde la Plaça de Sant Pere hasta la Estación del Norte y respirar el estilo de vida de un espacio único. Tras haber descubierto en nuestro viaje por los barrios más famosos de España el Barrio Gótico, toca recorrer las callejuelas y plazas de otro de los barrios con más sabor de Barcelona, el Barrio del Born.

Recorrido por el Barrio del Born de Barcelona

Arco del Triunfo, Parque de la Ciutadella y el Passeig Picasso establecen uno de los límites del barrio y se presentan como propuestas muy interesantes antes de empezar a conocer el barrio del Born. El Arco del Triunfo se estableció en esta parte de la ciudad con motivo de la Exposición Universal de 1888.

El paseo desemboca directamente en la entrada principal del Parque de la Ciutadella de Barcelona, un lugar perfecto para descansar y pasar un rato agradable. Saliendo por una de las puertas laterales del parque llegamos al Passeig de Picasso, inconfundible gracias a sus soportales. Desde allí nace una de las calles principales del barrio del Born: el carrer de la Princesa. A partir de aquí podemos girar a la derecha, dirección montaña, o a la izquierda, dirección mar, para callejear por su laberinto de callejuelas medievales y buscar los lugares más representativos del barrio.

Parte alta del barrio del Born

Si optamos por girar a la derecha, pequeñas calles peatonales y coquetas plazas se abren a nuestro paso. Cerca de la salida del metro de Urquinaona, en Via Laietana, está uno de los edificios más hermosos y peculiares de Barcelona, el Palau de la Música catalana.

Se puede realizar un recorrido guiado por su interior o comprar entradas para ver alguno de los espectáculos. Sea como fuere, recorrer el exterior y el interior del edificio se antoja como una de las obligaciones que se tienen cuando recorremos el barrio del Born. Se trata de una de las construcciones más increíbles del modernismo catalán, diseñada por Lluís Domènech i Montaner a comienzos del siglo XX. Patrimonio de la Humanidad, la fachada exterior es fotografiada cada día por miles de turistas que no imaginan que algo así pueda surgir entre las pequeñas callejuelas barcelonesas. En una calle perpendicular al Palau tenemos uno de los lugares culturales más de moda en el barrio, el Antic Teatre, ideal para ver algún espectáculo o tomar una copa en su amplio patio.

Menos conocido que el mercado de la Boquería es el Mercado de Santa Caterina, sin embargo, su colorido y ondulante tejado, su propuesta gastronómica y su ubicación cerca de la catedral, lo convierten en una referencia en Barcelona.

Como decíamos al comienzo, el barrio del Born puede ser un lugar caótico y lleno de turistas o puede ser un espacio tranquilo en el que desconectar. Dos espacios cumplen a la perfección esta función: la Plaza Sant Pere y el Convento de Sant Agustí.

El primero es una amplia plaza donde se encuentra la Iglesia de Sant Pere de les Puelles y donde hay varios cafés y establecimientos donde picar algo. El segundo es un antiguo convento hoy reconvertido en Centro Cívico donde se realizan un buen número de propuestas y actividades culturales muy interesantes. El edificio transmite paz y tranquilidad.

Parte baja del barrio del Born

Volvemos sobre nuestros pasos y cruzamos de nuevo el Carrer de la Princesa para conocer la parte del barrio que se encuentra cerca de la Estación de Francia y del barrio de la Barceloneta, otro de los barrios con más personalidad de Barcelona.

Cerca del Paseo Picasso y el Carrer de la Princesa nos encontramos con el que fue uno de los mercados más famosos de Barcelona y el primer edificio de hierro de la ciudad. El antiguo mercado dejó de funcionar y, tras unos años parado, volvió renacer convertido en el “Centre de Cultura del Born”, un espacio donde descubrir cómo era la vida de sus habitantes y donde apreciar las ruinas de la batalla de 1714. Hoy en día, en este espacio se realizan actividades culturales.

Una vez fuera del recinto divisaremos una coqueta plaza junto a un impresionante templo, son el Passeig del Born y la Catedral de Santa María. Pero vayamos por partes. El primero es el centro neurálgico del barrio, lleno de vida por la mañana, por la tarde y, por supuesto, por la noche. Junto a hermosos edificios del siglo XIV abren sus puertas modernos y bulliciosos bares. Si en la edad media se celebraban aquí todo tipo de eventos y actividades típicas de aquellos lejanos años (torneos medievales, mercados, ejecuciones…), ahora son los turistas los que han tomado esta plaza y disfrutan del increíble ambiente que en ella se respira.

Al final del paseo se encuentra la Iglesia de Santa María del Mar, uno de los templos más importantes de la ciudad y que tan famoso se hizo gracias a la novela “La Catedral del Mar”, de Ildefonso Falcones. Se trata de una maravillosa obra del gótico catalán que fue levantada por los propios ciudadanos del barrio en el siglo XIV, algo increíble de imaginar hoy. Se puede visitar la cripta, admirar el magnífico rosetón gótico de la fachada o disfrutar de la maravillosa panorámica que se tiene desde sus torres. No obstante, por alguna razón, el templo invita a sentarse en un banco y a pasar horas y horas respirando la paz que emite su sobrio interior.

Barcelona ha sido lugar de residencia de grandes artistas, uno de ellos es el genial Pablo Picasso. Sería un grave error dejar el barrio y no entrar en la Calle Montcada en el Museo Picasso. Allí veremos y comprenderemos algunas de las primeras obras del pintor malagueño.

Ahora que hemos visto los lugares más importantes del barrio, ya solo nos queda decidir si queremos seguir descubriendo el Born más turístico y bullicioso o ese otro Born de calles estrechas y solitarias y de tiendas y bares acogedores y tranquilos.