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Évora


La región portuguesa del Alentejo esconde una preciosa ciudad. Évora es una típica ciudad medieval amurallada, con callejuelas empedradas y numerosos rincones con encanto donde hacer una parada. Además, posee varios monumentos que nos recuerdan como esta región ha estado bajo el dominio de varias civilizaciones. Sigue leyendo para conocer con más detalle cuáles son los lugares imprescindibles que hay que ver en Évora.

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Datos Útiles


País: Portugal
Idioma: Portugués
Zona Horaria: GMT +1
Moneda: Euro
Requisitos de entrada: DNI Válido

Qué ver en Évora

Évora puede ser una parada muy interesante para aquellos que deseen viajar a Lisboa en coche desde diferentes localidades del sur de España y estén pensando en hacer un alto en el camino para descubrir otras ciudades del país vecino que, aunque más pequeñas, poseen un especial encanto. Por otro lado, la visita a Évora puede servir para que el viajero conozca otros rincones del país vecino más allá de Lisboa u Oporto. Daremos un paseo por las calles y plazas de esta interesante ciudad portuguesa con el objetivo de descubrir todos aquellos monumentos y lugares de interés que hay que ver en Évora.

Plaza de Giraldo

Es casi obligado comenzar la visita a Évora en la Plaza de Giraldo (Praça do Giraldo), ya que este es el centro neurálgico de la ciudad y nos puede servir como perfecto punto de partida para descubrir otros lugares interesantes de Évora. Si nos centramos solo en la plaza, tenemos que destacar la fuente de segunda mitad del XVI que se encuentra en medio de ella. Otro de sus monumentos es la Iglesia de Santo Antão. Sin embargo, este espacio no necesita de grandes construcciones que la embellezcan. Su encanto reside en que es una de las plazas principales de Évora que eligen sus habitantes para tomar un café o degustar productos gastronómicos típicos de la región en alguna de sus numerosas cafeterías o pastelerías. Otra de las razones por las que recomendamos comenzar la visita a Évora en la Praça do Giraldo es porque en ella se encuentra la oficina de información turística.

Templo romano

El Templo romano de Évora, conocido como Templo de Diana, es la construcción que mejor representa la influencia de la civilización romana en esta ciudad portuguesa. Data del siglo I y todavía conserva 14 columnas realizadas en granito y mármol. El edificio ha tenido distintos usos a lo largo de la historia y fue restaurado en la segunda mitad del siglo XIX. Además del Templo de Diana, en Évora existen otras construcciones que dan buena muestra de su pasado romano, como algunas partes de la vieja muralla o unas termas romanas. En cualquier caso, ninguna de ellas tiene la importancia del templo romano, convertido, sin duda, en la imagen más representativa de la ciudad.

Biblioteca Pública de Évora

En la misma plaza donde está el templo romano se encuentra la Biblioteca de Évora, un edificio que merece la pena conocer tanto por su continente como por su contenido. Y es que, las paredes de la biblioteca guardan hasta 6000 libros del siglo XVI, una de las épocas de mayor prosperidad para la ciudad. La imagen del templo junto a la biblioteca convierten a este espacio en uno de los más hermosos de esta localidad portuguesa.

Catedral de Évora

Dejamos atrás la época romana para empezar a conocer algunos de los edificios religiosos más interesantes de Évora. La Catedral de Évora o Catedral de Santa María es un magnífico templo del siglo XIV que combina dos estilos arquitectónicos, el románico y el gótico. De entre sus elementos sobresale su magnífico claustro. Otra de las razones por las que merece la pena acercarse hasta la catedral es para poder disfrutar de las preciosas vistas que nos regala del paisaje que rodea a la ciudad.

Iglesia de San Francisco

La Plaza de Giraldo o Praça do Giraldo nos sirve de nuevo como campamento base para llegar hasta un templo que ha sido testigo de varios hechos históricos de la ciudad, la Iglesia de San Francisco. Se trata de un edificio del siglo XVI construido en estilo gótico manuelino. En su interior destacan algunos retablos, el museo de arte sacro y una exposición de belenes.

Capela dos Ossos

Anexa a la Iglesia de San Francisco está la Capela dos Ossos, sin duda, el monumento más tétrico y peculiar de la ciudad y, posiblemente, de todo Portugal. Se trata de una capilla cuyos muros y columnas están realizados con calaveras y huesos de restos humanos traídos hasta aquí desde los cementerios de la ciudad. La idea procede de varios frailes del convento que querían mostrar, de esta curiosa manera, la fugacidad de la vida humana, el paso breve de nuestra estancia en la tierra. Seguramente, los numerosos turistas que visitan este osario tendrán ese mismo pensamiento al caminar entre más de 5000 restos humanos. Por cierto, en un pueblecito de Valladolid llamado Wamba existe un lugar parecido a este.

Iglesia de San Juan Evangelista

Tenemos que hablar de la Iglesia de San Juan Evangelista por su interior, ya que se encuentra totalmente ornamentada con azulejos pintados a mano. Una decoración muy distinta a las que estamos acostumbrados a ver en las iglesias.

Iglesia de Gracia

El último de los edificios religiosos de Évora del que hablaremos es de la Iglesia de Gracia. En ella sobresale el pórtico y algunas esculturas de gran tamaño que la decoran.

Patio de Sao Miguel

Cerca de la catedral encontramos uno de los mejores lugares de esta ciudad portuguesa para descansar y relajarse: el Patio de San Miguel. Posee bellos jardines y ha sido declarado Monumento Nacional.

Murallas de Évora

Como buena ciudad medieval, el casco histórico de Évora está rodeado por una muralla construida en el siglo XVI y XVII al quedarse pequeñas las antiguas murallas del siglo III (de las cuales quedan algunos restos visibles). Un pequeño camino las recorre para que los visitantes puedan dar un agradable paseo junto a uno de los monumentos medievales más importantes de la ciudad.

Acueducto de Évora

El último de los monumentos que conoceremos en esta ruta por todo lo que hay que ver Évora es el acueducto Agua de Plata. Su construcción comenzó en el año 1532 y finalizó en el 1537 con el fin de abastecer de agua a la ciudad. Tiene 18 kilómetros y a lo largo de los siglos ha sido objeto de diferentes modificaciones y restauraciones.

Recinto megalítico de Los Almendros

Ya a las afueras de Évora se encuentra el Crómlech de los Almendros, una zona que alberga uno de los conjuntos megalíticos más importantes de Europa.


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