Sin embargo, si alguien nos preguntase qué ver en Hervás, responderíamos que el motivo de nuestro viaje es el de recorrer las estrechas callejuelas de una de las juderías más interesantes y mejor conservadas de España.

 
Hervás se encuentra en el norte de la provincia de Cáceres, en el Valle del Ambroz. Este valle cacereño nos deja la bella estampa de uno de los bosques más bonitos de España. Allí encontraremos encinas, robles, alcornoques, chopos y, por supuesto, castaños, especie arbórea que destaca en la zona conocida como Castañar de Hervás. Este bucólico paisaje envuelve a Hervás, un pueblo que acogió a una importante comunidad judía en el siglo XV y que desde entonces esconde una de las más hermosas juderías de toda España.

¿Cuál es la mejor época para visitar Hervás?

Cualquier época es buena para visitar Hervás. Sin embargo, nosotros te proponemos tres meses que, por distintas razones, hacen que la visita a la localidad sea especial. A finales de marzo y principios de abril suele producirse la floración de los cerezos del Valle del Jerte y puede ser un buen plan acercarse a ver esa explosión de belleza que se produce en el valle y dejar una tarde para visitar Hervás. Otro mes interesante, a pesar del calor del verano cacereño, es comienzos de julio, pues en esta época se celebra un interesante festival en la localidad conocido como “Fiesta de los conversos”. Y, por supuesto, merece mucho la pena visitar Hervás en otoño, cuando el valle se viste con sus mejores galas y nos regala preciosas estampas. De hecho, en noviembre se celebran en esta zona un buen número de actividades en la naturaleza que forman parte del conocido como “Otoño mágico en el Valle del Ambroz”.

Qué ver en Hervás

Como no podía ser de otra manera, nuestra ruta por Hervás comienza en el barrio judío, para después visitar otros lugares de interés de la localidad.

Judería de Hervás

A finales del siglo XIV, Hervás sirvió como refugio para judíos que huían de otros territorios de la geografía española. En lo que es hoy la parte baja de la judería de Hervás se asentaron hasta 45 familias judías. Allí vivían y allí desempeñaban sus oficios. Convivieron con la comunidad cristiana de Hervás durante algo más de un siglo, concretamente hasta 1492, fecha en la que los Reyes Católicos promulgaron el conocido como “Edicto de Granada”, por el cual se decretaba que los judíos residentes en la Corona de Castilla fueran expulsados o se convirtieran al cristianismo. Su paso por la localidad se puede apreciar hoy en día en su judería, una de las más bonitas de España. Hervás pertenece a la Red de Juderías de España – Caminos de Sefarad.

Cómo es la judería de Hervás y qué lugares no nos podemos perder

La judería de Hervás es una de las mejor conservadas del país y es el principal atractivo turístico de la localidad extremeña. Sabrás que estás en ella cuando te encuentres con un laberinto de calles estrechas y empedradas que suben y bajan sin un orden establecido, flanqueadas por casas blancas encaladas con entramados de madera y balcones decorados con flores y macetas (algunas casas tienen toda la fachada tomada por macetas y plantas) y con pequeños detalles en sus fachadas (estrellas de David, letras hebreas…) que nos indican que estamos ante aquellas casas que un día habitó la comunidad judía.

 
Paseando por estas callejuelas encontraremos varios lugares de interés: la Plaza de la Corredera, del siglo XVI con bonita fuente en el centro; la calle Rabilero, una de las más icónicas de la localidad; la Travesía del Morón, de la que se decía que era la calle más estrecha de España con sus 50 cm (aunque parece que existe una aún más estrecha en Urriés, en la provincia de Zaragoza); o la Casa de los Cactus, que llama la atención por su patio repleto de plantas. Sin embargo, lo mejor es perderse por las calles de la judería y descubrir cada pequeño rincón de una zona declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1968.

Puente de la Fuente Chiquita

Junto a la judería surge una de las postales más bonitas de Hervás, la del Puente de la Fuente Chiquita cruzando las aguas del río Ambroz. Algo que pasa desapercibido al viajero al principio, pero que llama la atención cuando conocen de qué se trata, es una piedra que hay en el puente que en realidad es la lápida de una tumba. El Puente de la Fuente Chiquita es un buen lugar para detenerse un rato a descansar tras haber recorrido y pateado las calles empedradas de la judería.

Iglesia de Santa María de Aguas Vivas

Y tras haber recorrido las umbrías callejuelas de la judería de Hervás, una buena idea es llegar hasta la Iglesia de Santa María de Aguas Vivas y disfrutar de la amplia panorámica que tenemos desde este punto de la localidad, ya que levantó en una de las zonas elevadas del pueblo, convirtiéndose en un mirador natural de primera. Se trata de una construcción del siglo XIII que tiene su origen en una fortaleza defensiva templaria. En el interior llama la atención el altar mayor.

 
Otra construcción religiosa que merece la pena visitar en Hervás es el Convento de los Trinitarios, del siglo XVII, y la Iglesia de San Juan Bautista.

Museos para visitar en Hervás

Hay dos museos en Hervás, muy diferentes entre sí, a los que podemos acercarnos. El primero de ellos es el Museo Pérez Comendador – Leroux, un museo que se encuentra en un palacio barroco del siglo XVIII y que alberga la obra de este escultor y las pinturas realizadas por su mujer, la francesa Madeleine Leroux. El segundo es el Museo de la Moto y el Coche clásico, ubicado en un curioso edificio, alberga una importante colección de distintos tipos de vehículos.