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Qué ver en Cambados, un lugar mágico y diferente


Morriña, añoranza, nostalgia o anhelo son cuatro palabras que nos pueden servir perfectamente para definir lo que el viajero siente cuando deja Cambados. Y es que, quizá no sea todo lo que hay que ver en Cambados lo que lo hace tan especial, sino la melancolía y magia que transmiten algunos de los lugares más importantes de esta población gallega.

Galicia Galicia Galicia Galicia
Datos Útiles


País: España
Idioma: Español
Zona Horaria: GMT +1
Moneda: Euro
Requisitos de entrada:

Cambados se encuentra ubicado en las Rías Baixas, en la provincia de Pontevedra. Es un destino ideal para dedicar un fin de semana o, si podemos alargar el viaje, para combinarlo con otros lugares espectaculares cercanos como la Illa de Arousa o la Península de O Grove, donde descubriremos algunas de las mejores playas de Galicia. Si a todo esto, le sumamos que Cambados está considerada como la Capital del Albariño y que en 2017 fue elegida como Ciudad Europea del Vino, entonces empieza a ser muy difícil resistirse a visitarla.

Qué ver en Cambados

Hacíamos referencia en nuestra introducción a que Cambados es una localidad muy especial. Y, es que, algo de único tiene que tener un pueblo en el que dos de sus rincones más fascinantes sean una iglesia en ruinas junto a un cementerio y los restos de una antigua torre defensiva junto al mar. Sin embargo, hay muchas más cosas que ver en Cambados. A continuación haremos un pequeño recorrido por algunas de ellas.

Casco antiguo de Cambados

La visita a Cambados puede comenzar recorriendo el casco viejo de la localidad. Aquí, calles y plazas se encargan de guardar, como si de un magnífico tesoro se tratase, algunos de los edificios y rincones con más encanto de esta población gallega.

Plaza de Fefiñáns

La Rúa Real es una de las calles más bonitas de cuantas recorren el casco histórico de Cambados y desemboca en la Plaza de Fefiñáns, corazón de la localidad y, sin duda, uno de sus atractivos turísticos más importantes. Se trata de una amplia plaza de más de 2500 metros cuadrados, edificada en el siglo XVI en estilo italiano y donde encontramos algunos de los edificios más representativos de Cambados como el Pazo de Fefiñáns, con un curioso Arco-Puente, y la Iglesia de San Benito. Servía como Plaza de Mercado.

Pazo de Fefiñáns

Sin lugar a la duda, el edificio que destaca por encima de todo en esta plaza es el Pazo de Fefiñáns. Se trata de un enorme pazo del siglo XVI construido en forma de L que combina los estilos renacentista y barroco. Aunque todo el conjunto arquitectónico merece la pena, hay dos elementos que quizá sean los que más llaman la atención del visitante: un curioso Arco-Puente y la Torre del Homenaje. En la actualidad acoge dos bodegas de albariño: Joaquín Gil Armada y Bodega Palacio Fefiñans.

Iglesia de San Benito

No nos alejamos de la Plaza de Fefiñáns para encontrar otro de los monumentos más interesantes de Cambados, la Iglesia de San Benito. Se trata de un bonito templo que combina varios estilos en el que se imponen el barroco y el neoclásico, pero donde también se aprecian elementos góticos de su interior. Del exterior llama la atención sus dos esbeltos campanarios barrocos.

Otros lugares imprescindibles que nos deja el casco antiguo de Cambados son el Convento de San Francisco, actual iglesia parroquial de finales del XVI construida en estilo gótico marinero, y la Casa de las Conchas, cuya fachada está decorada con algunos de estos elementos.

Los Pazos de Cambados

En un recorrido por las calles y plazas de Cambados es seguro que saldrán a nuestro encuentro varios pazos, esas casonas señoriales tan típicas de Galicia. Algunos de los más importantes que hay en la localidad pontevedresa son: el Pazo de Bazán, del siglo XVII y que actualmente hace las funciones de Parador; el Pazo de Montesacro, magnífica construcción también del XVII que ahora es una residencia para la tercera edad; Pazo Torrado, del XVIII y cuya función en la actualidad es la de Sala de Exposiciones; Pazo de Fajardo, del XVII y, en especial, el Pazo de Ulloa, edificio del XV al que también se le conoce como Casona Os Pazos.

Torre de San Sadurniño

Hemos querido dejar para el final la visita a los dos lugares que dan a Cambados esa combinación de magia, melancolía y belleza que lo convierten en un destino diferente. El primero de ellos es la Torre de San Sadurniño, un rincón de Cambados que destaca no solo por su ubicación, sino por el camino que hay que recorrer para llegar hasta él. Así es, tras dejar atrás el barrio de pescadores de San Tomé y el oscuro arenal de la Praia A Mouta, un largo y estrecho puente de piedra nos conduce a un pequeño islote. Allí permanecen todavía erguidos y orgullosos los restos de lo que otrora fue una torre defensiva. Maravillosas vistas y espectaculares atardeceres llenan de encanto este lugar.

Ruinas de Santa Mariña Dozo

¿Cómo describir las sensaciones que despierta este enclave tan mágico? No es nada fácil encontrar adjetivos que expliquen cómo es este lugar: hechizante, fascinante, seductor, místico o espiritual son algunos de los términos que se nos ocurren. Estamos ante las ruinas de lo que en su día fue la Iglesia Parroquial de Santa Mariña, un templo del XII reformado en siglos posteriores, pero que poco a poco fue quedando en ruinas. Hoy en día solo se conservan algunas partes entre las que destacan cuatro arcos transversales románicos. Junto a las ruinas, un cementerio contribuye a acrecentar en nuestra imaginación esa sensación de lugar mágico. Podemos completar esta visita tan especial subiendo hasta el Mirador de A Pastora, donde disfrutaremos de unas vistas increíbles de Cambados y de la ría ¿hay mejor manera de terminar la visita a Cambados?


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