Las Casas Colgadas de Cuenca

Como no podía ser de otra manera, comenzamos la visita a Cuenca por las famosas Casas Colgadas. Fueron construidas en los siglos XIV y XV (sorprende como en la Edad Media se llevaban a cabo semejantes obras de ingeniería), asomándose al abismo del río Huécar desde lo alto de un acantilado. Además de por su ubicación, sorprenden por la belleza de los balcones de madera suspendidos en la nada.

Hoy en día se conservan tres de las casas que se construyeron inicialmente y que fueron compradas y restauradas por el ayuntamiento de la ciudad en los primeros años del siglo pasado: la Casa de la Sirena y las dos Casas del Rey.

Las Casas del Rey albergan el Museo del Arte Abstracto Español. Un museo que fue puesto en marcha en el año 1966 por Fernando Zóbel con la ayuda de Gerardo Rueda y en el que podemos disfrutar de algunas obras de los mejores pintores españoles de las décadas de los 50 y de los 60. Trabajos de artistas de la talla del propio Zóbel, Miralles, Tápies o Saura, pueblan sus salas. Además, también es posible recorrer diversas exposiciones de carácter temporal.

El conjunto de la belleza del continente, las Casas Colgadas, con el gran valor del contenido reunido por el museo, ha contribuido a que haya conseguido entre otros premios la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.

Qué ver en Cuenca

A continuación, te contamos qué ver en Cuenca, Ciudad Patrimonio de la Humanidad desde 1996, más allá de sus Casas Colgadas.

Catedral de Santa María y San Julián

Dejamos atrás la impresionante obra de ingeniería que suponen las Casas Colgantes, para dirigir nuestros pasos hasta la Catedral de Santa María y San Julián de Cuenca, principal templo religioso de la ciudad y uno de sus monumentos más importantes. Se trata de una preciosa construcción de finales del siglo XII, ordenada construir por Alfonso VIII tras la reconquista de la ciudad. Es de estilo gótico y sus formas nos recuerdan a la famosa Catedral Notre Dame de París. Pero lo más bello del templo es su interior, destacando el coro, las numerosas capillas, el claustro y la Torre del Ángel.

Plaza Mayor y ayuntamiento

Próxima a la catedral está la Plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad en la que encontramos otras dos construcciones importantes de Cuenca: el Ayuntamiento, de estilo barroco, y el Convento de las Petras, edificio del siglo XVI.

Torre de Mangana

Torre de cerca de 30 metros de altura que se levantó en el siglo XVI sobre una construcción anterior y que tuvo que ser reformada ya en el siglo XX. Es de estilo neomudéjar y cuenta con un reloj.

Puente de San Pablo

Dejamos atrás la catedral y alrededores y dirigimos nuestros pasos en dirección al rio Huécar para conocer el Puente de San Pablo. Si las Casas Colgadas ya nos producían cierto vértigo al estar suspendidas sobre el acantilado, no menos vértigo es el que produce este maravilloso puente desde el que se tienen algunas de las mejores vistas de las Casas Colgadas; y es que sus dimensiones (100 metros de largo y 40 metros de altura) lo convierten en uno de los mejores lugares para capturar una preciosa instantánea de la construcción más famosa de la ciudad. El puente original era de mediados del siglo XVI, pero tras varios rompimientos, tuvo que ser construido de nuevo a comienzos del siglo XX, utilizando para ello la madera y el hierro.

Túneles de la calle Alfonso VIII

Y de las alturas, los abismos y el vértigo que hemos sentido en las Casas Colgadas y en el Puente de San Pablo, a meternos bajo tierra. Una de las visitas que recomendamos realizar en Cuenca es acercarse a conocer el Túnel de la colorida Calle Alfonso VIII y descubrir el proyecto Cuenca subterránea. En los años de la Guerra Civil, esta red de túneles protegía a los vecinos del casco antiguo de los posibles ataques aéreos que pudieran producirse en plena guerra. Hoy en día, y gracias a su rehabilitación, es posible visitar los 90 metros del túnel de la Calle Alfonso VIII y conocer mejor ciertos aspectos de la ciudad.

Los rascacielos de Cuenca

En la parte posterior de la calle Alfonso VIII, están los conocidos como “Rascacielos de Cuenca”. Así es, en el barrio de San Martín descubrimos un conjunto de casas medievales (y algunas posteriores), de cuerpo estrecho. Al levantarse sobre las hoces del río Huécar, algunas de ellas alcanzan las 9, 10 u 11 plantas, otorgándolas el ilustre título de los “Rascacielos de Cuenca”.

Otros museos de la ciudad

No queremos terminar la visita a la ciudad Conquense sin hablar de otro de sus museos más importantes, el de la Fundación Antonio Pérez, con 35 salas y más de 4000 obras dedicadas al arte contemporáneo.

Alrededores de Cuenca

Para finalizar, recomendamos al viajero que se decida por pasar unos días por tierras conquenses que reserve una tarde para acercarse desde la capital hasta Segóbriga y visite el magnífico yacimiento arqueológico romano que allí se encuentra, compuesto por el teatro romano (en muy buen estado de conservación), las termas, el foro, la plaza porticada, la muralla, las viviendas tardorrepublicanas, el coliseo y la basílica.

Otra opción es realizar una ruta por los pueblos más bonitos de Cuenca y conocer los rincones y monumentos más importantes de la provincia como la villa medieval de Belmonte, coronada por un imponente castillo; Huete y el majestuoso Monasterio de Santa María de la Merced; San Clemente y su extenso conjunto monumental renacentista, o Uclés y un monasterio que por sus dimensiones es conocido como “El Escorial de la Mancha”, entre otros pueblos.