Con la llegada de la primavera y el buen tiempo, los destinos de playa empiezan a cobrar protagonismo un año más. Por eso, desde Me Gusta Viajar Barato os proponemos una ruta por uno de los destinos turísticos más famosos y concurridos del litoral español: la Costa Dorada, famosa por sus playas, sus suaves temperaturas y su rica y variada oferta de ocio y gastronomía. ¿Hacemos las maletas?

Costa Dorada es el nombre con el que se conoce el litoral de la provincia de Tarragona, un área que comprende más de 200 kilómetros de bellas playa, calas y acantilados, desde el límite con Barcelona hasta rozar la provincia de Castellón. Aunque no está claro el origen de esta nomenclatura, muchos apuntan a la brillante arena de sus playas como el elemento que inspiró el nombre. De hecho, uno de los fenómenos más curiosos de esta zona es su orilla, salpicada de motas doradas cuando la bañan las olas. Algunos de los lugares y poblaciones que no podemos perdernos en la Costa Dorada son:

-. Tarragona: la capital de la provincia del mismo nombre, es una ciudad caracterizada por su notable patrimonio histórico y arquitectónico, que se remonta a la antigua Tarraco romana y que le ha valido la declaración de Patrimonio Mundial por la UNESCO. Caminar por sus calles es tropezar continuamente con los vestigios de la antigua época imperial, como la muralla, el foro, el circo o el anfiteatro, situado junto al mar en la parte baja de la ciudad para facilitar el acceso del público y el desembarco de los animales que se usaban para los espectáculos. Su buen estado de conservación hace que, todavía hoy, acoja actuaciones de todo tipo. Otro de los atractivos de Tarragona es su barrio pescador, El Serrallo, donde se puede asistir a la subasta del pescado del día o disfrutar de la gastronomía marinera en uno de sus restaurantes.

- Salou: turística y bulliciosa, Salou es la ciudad que nunca duerme, ya que combina kilómetros de playas y calas con una variada oferta de ocio nocturno. Ideal si viajamos con amigos y queremos disfrutar de la noche y al mismo tiempo aprovechar los días con largos baños de sol y chapuzones salados. Además, la localidad ofrece amplias playas con todos los servicios (chiringuitos, alquiler de hamacas, hinchables, deportes acuáticos…) y preciosas calas más escondidas. Mención a parte merecen las fuentes, que la población ha elevado a la categoría de atracción turística. Pasear por Salou es descubrir varias fuentes con espectáculos de música, luz y color que atraen a decenas de visitantes y curiosos cada día. Otro de sus atractivos, sobretodo si viajamos con niños, es la cercanía al parque de atracciones Port Aventura, situado en la misma localidad y al que se puede acceder con distintos transportes públicos.

- Cambrils: situada junto a la vecina Salou, Cambrils es completamente diferente. Se trata de un antiguo pueblo de pescadores, que se ha reconvertido gracias al turismo y al hecho de haber mantenido una rica gastronomía marinera. Es, de hecho, famosa por su pesca y sus restaurantes, donde puede degustarse desde una paella hasta una mariscada, todo ello sin olvidar las especialidades locales. Además, Cambrils disfruta de varios kilómetros de playas de arena dorada y aguas poco profundas, lo que la convierte en ideal para familias.

- Miami Playa: resiguiendo el litoral en dirección a Valencia, nos encontramos con Miami Playa, una urbanización del término municipal de Montroig del Camp, población donde el célebre pintor Joan Miró pasó largas estancias para reponerse de una enfermedad. Se trata de una localidad tranquila, donde predomina el turismo familiar y los viajeros que buscan relax y descanso. Sus anchas playas y sus pequeñas calas, son también una opción ideal para pasar un día si nos alojamos en otra población.

- L’Ametlla de Mar: ya casi en el Delta del Ebro, l’Ametlla de Mar es un pequeño pueblo blanco que ha mantenido su esencia pescadora. La localidad conserva una amplia flota de barcos de pesca y, especialmente de atuneros, ya que la pesca del atún rojo en la zona se remonta al siglo XVII, época en la que se capturaba a los ejemplares de esta especie mediante la técnica del almadraba. Actualmente, algunas empresas de l’Ametlla han creado varias actividades turísticas alrededor de la pesca del atún, como la posibilidad de bañarse entre atunes a más de cinco kilómetros de la costa.