Situado en el norte de la península y limitando con Francia, Aragón esconde algunos de esos parajes que enamoran a los amantes de la montaña. Pero hay otros encantos en esta tierra como su gastronomía, especialmente ideada para recobrar fuerzas después de andar durante horas por sus parques naturales.

Aragón es la cuna del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, segundo de España y reconocido en 1918. En el podremos caminar por numerosas rutas por las que observaremos la riqueza natural del parque. La fauna incorpora Mochuelos boreales, urogallos, corzos, jabalís, ciervos, quebrantahuesos y ¡hasta osos pardos! pero tranquilos que la población es muy reducida y se centran en los rincones más escondidos de la montaña aragonesa.

Una ruta que os recomendamos desde MGVB es perfecta para los no muy experimentados en el senderismo pero que les guste disfrutar de la naturaleza. En la ruta de la Cola de Caballo, de unos 14 kilómetros de recorrido, cruzaremos el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido visitando las cascadas de Arripas, de la Cueva y del Estrecho y finalizando la caminata en la cascada Cola de Caballo. Un recorrido largo pero ameno que nos permitirá conocer la belleza de los parajes del Parque Nacional.

En la provincia de Huesca, en su zona pirenaica, encontramos el Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara. Una interesante aunque difícil ruta para poder explorar estas montañas y valles. Nos llevara hasta el Castillo de Naya y el Salto de Tresuns. En las afueras del pueblo de Morrano, en dirección a Bierge-Aguas,  tomaremos un desvío donde entraremos en la ruta. En esta ruta de 12 kilómetros subiremos al Castillo de Naya, un montículo de piedra que corona el valle y donde tendremos unas espléndidas vistas, cruzaremos  la Peonera y llegaremos al Barranco de Tresuns donde si tenemos suerte y encontramos agua veremos una cascada de 50 metros. Esta ruta tiene un desnivel de 600 metros y se estima una duración de 6 horas.

En el Valle del Tena, en pleno pirineo aragonés, encontraremos pequeños pueblecitos, que aunque su actividad principal sea el turismo, mantienen ese halo de cuento de hadas rodeados de densa y abrupta vegetación y flanqueados por las imponentes montañas pirenaicas. Panticosa es uno de estos pequeños pueblos de ensueño y pintorescos donde podrás disfrutar de un paseo por sus calles y retomar fuerzas en alguno de sus restaurantes. La cocina aragonesa se caracteriza por la sencillez y la calidad de sus productos, típica de alta montaña, saborearemos pescados y carnes como el jabalí, ternasco, cerdo, ternero, conejo, perdiz, truchas, rapes,... un sinfín de productos con innumerables recetas que quizá hará que ganemos algún kilito, pero con una sonrisa en los labios.

Aragón es uno de esos lugares que cuando más conoces más te atraen. Escondiendo celosamente sus parajes más encantadores, Aragón se convierte para el viajero en un juego donde iremos hallando rincones que nos sorprenderán.

Enlaces oficiales:

http://www.caiaragon.com
http://www.turismodearagon.com/web/
http://www.gastronomia-aragonesa.com