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Kenia, cuna del mundo


Hablar de Kenia evoca a naturaleza con todas sus letras, pero una naturaleza salvaje, pura. Un lugar donde las leyes imperantes son las de la jungla, donde los grandes depredadores cazan para poder alimentar a sus cachorros y las presas dan su vida para poder proteger a sus crías. Los paisajes keniatas despertarán nuestro yo más animal y prehistórico con los potentes tonos rojizos y ocres que nos regala su amanecer.

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Datos Útiles


País: Kenia
Idioma: Swahili, English
Zona Horaria: GMT +3
Moneda: Kenyan shilling (KES)
Requisitos de entrada: Pasaporte válido para 6 meses y visado.

Bienvenidos a la cuna de la humanidad, donde los primeros homínidos empezaban a
descubrir qué es eso tan maravilloso que es viajar.

Los dos atractivos principales de Kenia son su diversidad animal y la riqueza de sus paisajes. Grandes mamíferos como cebras, elefantes, jirafas o ñus, pasando por sus eternos enemigos como los leones, los guepardos o las hienas que pugnan desde los inicios de los tiempos por sobrevivir en esta tierra tan antigua como la vida misma.
Cuando hablamos de paisajes africanos a todo el mundo le viene a la cabeza la mítica imagen de un amanecer de potente rojo que ensombrece a una acacia mientras una jirafa pasea por los alrededores. Pues esta imagen es solo una de las muchas con las que podremos gozar en Kenia. Sabanas extensísimas con manadas de elefantes caminando pesadamente, grandes extensiones de ñus corriendo a través de ríos para encontrar nuevos pastos, una familia de jirafas comiendo de las puntiagudas ramas de una acacia, un sinfín de instantáneas que quedarán por siempre grabadas en nuestra mente.

Maasai Mara

El Parque Nacional de Maasai Mara es uno de los más famosos parques de Kenia, comprende un área de 1.500km2 y en ella habitan una excepcional variedad de animales. Se extiende a lo largo del valle Gran Rift, el nombre viene de la tribu Maasai que vive en estas tierras. La tribu Maasai es una de las más famosas de África y se caracterizan por su gran altura, sus ropas y tintes rojizas  y su baile tradicional, el Amubu, que consiste en saltar verticalmente lo más alto posible con el cuerpo rígido.

Dentro de la reserva de Maasai Mara podremos contemplar uno de los espectáculos más brutales e impresionantes de la naturaleza, la migración de casi 3 millones de herbívoros, entre ñus y cebras, a la búsqueda de los prados verdes tanzanos. En este espectáculo tan bello como cruel veremos como manadas de leones y guepardos se abalanzan sobre las multitudinarias reses para conseguir alimento. Una vez pasada la sabana la ingente manada se dirige hacia el río Mara, allí encontrará otro peligroso escollo, los cocodrilos. Estos antiquísimos reptiles se esconden en las riberas del río esperando que un despistado ñu o cebra se acerque demasiado a sus fauces.

El parque alberga un total de más de 95 especies entre mamíferos, reptiles y anfibios, y más de 400 de aves. Este edén natural es el pragmatismo de la idea que a muchos nos viene a la cabeza cuando pensamos en África.

Aberdare

El Parque Nacional de Aberdare nos ofrece un paisaje diferente del que veremos en Maasai Mara. Aberdare se encuentra en una cadena volcánica entre la capital Nairobi y las cataratas Thomson, los paisajes más representativos se basan en frondosos bosques verdes, valles escarbados por altísimos saltos de agua y los picos que flanquean el parque como el Lesatima de 3.999 metros de altura. Dentro del parque también encontraremos una variada fauna con especímenes poco conocidos como los rinocerontes negros o los jabalís barbudos, a parte de elefantes, búfalos o gacelas.

Existen un par de hoteles especialmente acondicionados para la observación de los animales que pululan por sus alrededores. Los hoteles se llaman “Ark” y “Treetops” y están construidos a partir de madera e intentando mimetizarse con la naturaleza que los rodea.

Lago Nakuru

Este famoso lago ha servido de plató para innumerables películas y documentales. Declarado Parque Nacional, es el hogar de millones de flamencos que lo utilizan como parada durante su migración. Tiene una gran extensión pero con poca profundidad y con aguas altamente alcalinas.

A parte de los flamencos otras aves como los albatros o las cigüeñas también habitan el lago, al igual que mamíferos como los rinocerontes blancos y negros, cebras, búfalos, jirafas, leones y guepardos. Uno de los espectáculos que podremos ver es el despegue de miles de flamencos al momento donde una inmensa mancha rosa se despega del suelo y asciende hacia los cielos.

Mombasa

Como contrapunto a la sabana y la jungla nos dirigimos a Mombasa. Situada en el sur del país, Mombasa posee el más grande puerto de África Oriental, y también las más paradisíacas playas. Protegidas por una barrera de coral, las playas de la zona de Mombasa son de fina arena blanca y aguas turquesas. Un epílogo perfecto para poder descansar y rememorar todo lo vivido en uno de los países más sorprendentes de la África Negra.


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