Frigiliana es un pequeño y encantador pueblo de la provincia de Málaga al que los vecinos cuidan, miman y adornan con el objetivo de que todo aquel que se anime a descubrirlo lo encuentre aún más bonito ¿Quieres saber que hay que ver en este pueblecito y por qué Frigiliana es tan especial? Sigue leyendo que te lo contamos a continuación.
Qué ver en Frigiliana
Frigiliana se encuentra a unos 10 minutos en coche de Nerja, otro de los pueblos más bonitos de la provincia, y a algo menos de una hora de la capital malagueña. Realmente, en la localidad no hay ningún monumento digno de mención o de esos que van buscando los turistas, más bien es todo su casco histórico el que se puede considerar como el monumento más importante de Frigiliana. Si a esto sumamos que está rodeado por el precioso paisaje de la Sierra de la Almijara, entonces sobran las razones para acerarse a visitar Frigiliana.
Casco histórico de Frigiliana
Como decíamos, no hay ningún monumento importante en Frigiliana, sino que lo que hay que hacer cuando uno llega allí es perderse por las bellísimas calles de su casco antiguo e inmortalizar cada rincón con la cámara. La herencia morisca de Frigiliana se deja ver en el barrio del Barribarto, donde el aroma de su pasado árabe es más que evidente. El casco histórico de este pueblecito malagueño es una sucesión de pequeñas callejuelas empedradas, a cada cual más bonita, flanqueadas por blancas casas que sus moradores se han encargado de embellecer con todo tipo de flores y adornos. Algunas de las más bonitas son la calle Alta, la calle de la Amargura y la calle El Garral.
Plaza de las Tres Culturas
La Plaza de las Tres Culturas sirve de antesala perfecta al casco histórico de Frigiliana. Su nombre se debe a que en la localidad habitaron gentes de las tres religiones principales, la musulmana, la judía y la cristiana. Suele estar muy animada y es el aperitivo perfecto de todo lo que está por llegar.
Palacio de los Condes
Junto a la Plaza de las Tres Culturas se encuentra el Palacio de los Condes de Frigiliana o “El Ingenio”, nombre con el que también es conocido, una casona de estilo renacentista del siglo XVI. Además de por su interesante fachada, esta mansión es famosa porque en su interior alberga la única fábrica de miel de caña de toda Europa.
Calles más bonitas de Frigiliana
Tras haber realizado las fotos pertinentes a la plaza y al Palacio de los Condes, es el momento de adentrarse en la sucesión de callejuelas que componen el casco histórico de Frigiliana. Algunas de las imprescindibles son:
Calle Real: Sin duda, una de las calles más bonitas del pueblo, además de ser la más importante, pues cruza todo el casco antiguo y sirve de acceso a otras callejuelas secundarias. En ella están los Reales Pósitos, lugar donde se almacenaba el cereal.
Calle Hernando el Darra: Paseando por el inicio de la Calle Real, llegará un momento en el que aparezca ante nosotros una bifurcación. En ese punto es donde nace la calle Hernando el Darra, otra de las más fotogénicas de Frigiliana, y donde realmente comienza el casco antiguo. En este cruce de calles se presenta el primer dilema: ¿Qué calle tomo si las dos son iguales de bonitas? Y es que, esta bifurcación es uno de esos rincones del pueblo que nos dejan sin habla.
Callejón El Garral: Otra de esas citas ineludibles en el casco antiguo de Frigiliana es con el Callejón El Garral. En este lugar encontramos una nueva muestra de la convivencia en el pueblo de las tres religiones monoteístas principales: la Fuente de las Tres Culturas.
Iglesia de San Antonio de Padua
En una pequeña y animada plaza del casco histórico de Frigiliana está la Iglesia de San Antonio de Padua. Se trata de un templo del siglo XVII levantado sobre una antigua mezquita y que fue reformado un siglo después. Una parada imprescindible en el recorrido por la parte antigua del pueblo.
Casa del Apero
En otra de las calles más interesantes de la villa malagueña, la de la Cuesta del Apero, se encuentra la Casa del Apero, edificio del siglo XVII que acoge la Oficina de Turismo y la Biblioteca Municipal.
Un imprescindible: disfrutar de magníficas vistas desde los miradores de Frigiliana
Una vez que hemos recorrido las deliciosas callejuelas del casco histórico frigilianense, es el momento de encontrar un lugar en el que poder disfrutar de todo lo que hemos dejado atrás, así como del paisaje que rodea a esta preciosa población andaluza. Uno de los lugares que nos regala mejores vistas es el Mirador del Peñón, y una de las mejores cosas que hacer en Frigiliana es disfrutar de un maravilloso atardecer desde sitios como este.
Otros pueblos con encanto que ver en Málaga
Frigliana es un pueblo pequeñito, por lo que seguramente con un día será más que suficiente para recorrer sus calles principales y visitar sus lugares de interés. Si se dispone de más tiempo, una buena opción es acercarse a conocer Nerja, otro de los pueblos más bonitos de Málaga, que se encuentra a apenas 13 kilómetros de Frigiliana, famoso por que fue el escenario en el que se rodó la serie “Verano Azul” y porque allí están una de las cuevas más importantes del sur de España. Un poco más alejadas encontramos otras poblaciones con encanto de la provincia como Mijas o Ronda.